El Consejo Consultivo del Transporte sesionó ayer en Montevideo y acordó que los boletos que se compren con tarjeta STM (común, dos horas, diferencial, céntrico y zonal) no subirán de precio el próximo año, como es habitual, y se mantendrán en los valores actuales durante todo 2018. Sí subirá, en cambio, el boleto que se pague en efectivo, que pasará a costar 36 pesos.

Según registros de la Intendencia de Montevideo (IM), cuando asumió la actual administración los usuarios que tenían tarjeta STM eran 8% del total. Actualmente constituyen 40% y se espera que lleguen a ser 60%.

Fuentes de la comuna atribuyen la estabilidad del precio del boleto al mantenimiento de las condiciones macroeconómicas –en particular, a la inflación y el tipo de cambio controlados– y a que también se mantendrán los subsidios del gobierno nacional al gasoil y a los boletos estudiantiles.

Por otra parte, luego de caídas significativas en 2016 y en el primer semestre de 2017, la venta de boletos parece estar estabilizándose. La IM atribuye esta recuperación a ciertas acciones concretas tomadas para estimular el uso del transporte colectivo, por ejemplo, haber rebajado en dos pesos el precio del boleto a partir del 1º de julio para quienes pagaran con la tarjeta STM; haber aumentado el número de puntos de venta y recarga de tarjetas (actualmente hay 300 lugares en los que se pueden adquirir y 2.300 puntos de recarga), y haber establecido una rebaja del mínimo de recarga a 100 pesos.

El Consejo Consultivo funciona desde enero de este año y la IM estima que se trata de un ámbito propicio para alcanzar acuerdos, debido a que están representados todos los sectores involucrados en el transporte: autoridades, empresas, trabajadores y usuarios.