“El año que viene se van a cumplir diez años de que en un encuentro nacional decidimos romper con el Frente Amplio [FA]. Fue realmente un desafío y el inicio de la más dura resistencia. Nos pronosticaron tres meses de vida, nos dijeron que estábamos locos”, contó el diputado Eduardo Rubio, el sábado de mañana en el encuentro nacional de militantes del Movimiento 26 de Marzo (Unidad Popular, UP), que tuvo lugar en su local central, en la calle Durazno. En el repaso de la escisión del movimiento, Rubio aseguró que resistieron al intento de “aislamiento” que les hicieron sufrir y que no fue por “capricho ni locura”, sino por una “definición ideológica de fondo” que los impulsó a “no renunciar a los principios”.

Agregó que, pasado el “tiempo de resistencia”, para la agrupación hoy es “tiempo de avance, desarrollo y crecimiento”, y destacó el “gran salto” que dieron con la conformación del “frente medioambiental”, un espacio de trabajo que “lucha por los recursos naturales”. “Entendimos que no hay una fuerza que sea realmente de izquierda si no tiene la defensa de los recursos naturales y el medioambiente dentro de su programa y su definición esencial, porque este capitalismo salvaje es el principal enemigo del medioambiente, por lo tanto, también es parte de nuestra lucha”, indicó Rubio, quien luego se dedicó a diagnosticar el panorama político de América Latina.

Aseguró que estamos “en la etapa de agotamiento del modelo progresista”, tanto en Uruguay como en la región. “¿Dónde está el progresismo de Brasil? ¿Y el de Argentina ? ¿Y el de Chile? Cada uno de esos procesos va siendo derrotado, inmerso en la corrupción y en el abandono de los principios. Son procesos que optaron por arreglar la vereda y no por cambiar el mundo. Y además, arreglarla de la mano del patrón: el Banco Mundial y las multinacionales. De esa manera no se arregla ni la vereda, y eso ha llevado al fracaso”, señaló. Subrayó que el gobierno del FA está “en crisis y sin propuestas”, a excepción del contrato que firmó con UPM para instalar otra planta de celulosa, que para Rubio es un acuerdo “tan entreguista” que “no hay antecedente” de un arreglo similar.

El diputado aseguró que el gobierno tiene “un desgaste brutal” y que en cada planteo que realiza se produce una crisis interna, como es el caso del posible Tratado de Libre Comercio con Chile, “un embrollo que hace dos años están por mandar al Parlamento” (se encuentra a estudio en la Comisión de Relaciones Internacionales del Senado). Luego se refirió al proyecto de ley sobre cincuentones, que a su juicio es “muy malo”, porque instala un fideicomiso y “te demora en desafiliarte de las AFAP”, y “está generando la división más grande que el FA haya tenido en la última etapa”. “No hay antecedentes de una crisis de esta magnitud en el partido de gobierno; la quieren disfrazar, la esconden, pero está instalada. Y si el proyecto sufre modificaciones en la dirección que [el ministro de Economía y Finanzas, Danilo] Astori plantea, para nosotros no va a ser un proyecto votable, porque les va recortar en un 20% o 30% la jubilación a los trabajadores, y a las AFAP no las va a rozar ni con un pelo; en última instancia, van a condenar a Rentas Generales”, aseguró.

Rubio subrayó que, ante la crisis del gobierno, su movimiento aparece “como una referencia”, aun teniendo en cuenta la “humildad” de su dimensión. Dijo que la principal tarea del partido es salir a buscar “a toda la gente” que está desilusionada, frustrada e indignada, y que “ya no hay un camino en la fuerza de cambio en la que en un momento todos trabajamos”. Contó que hace unos días una señora lo paró en la calle y le dijo: “Qué suerte que está la UP, para no tener que seguir votando al FA”.

“Si sumamos la ley de bancarización más la batalla de Astori en defensa de las AFAP y el desmantelamiento del Banco República, no ha habido gobierno más firmemente al servicio del capital financiero internacional que este, con el ministro Astori a la cabeza”, indicó Rubio. Agregó que antes criticaban a Juan Eduardo Azzini, quien estableció la reforma monetaria en 1959, cuando era ministro de Hacienda, durante el Consejo Nacional de Gobierno del Partido Nacional, pero para Rubio aquellas políticas “eran de izquierda” comparadas con las del actual gobierno de FA. “Fue la primera carta de intención con el Fondo Monetario Internacional [FMI]. Lo aprendí leyendo libros de Astori, cuando él criticaba al FMI”, señaló.

Por último, el diputado indicó que su partido ha marcado “la agenda política del país”; puso como ejemplo la creación de la comisión investigadora de la gestión de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y la denominada estafa al Fondo Nacional de Salud. Dijo que asumieron ese desafío por “una cuestión de principios” y para defender la salud pública, que es “parte sustancial” de su lucha. Subrayó que la investigadora dejó al descubierto que el Sistema Nacional Integrado de Salud “es la plataforma más importante de financiamiento de los empresarios privados de la salud que hubo en la historia de Uruguay”. “No hay forma de complementar a quienes tienen como objetivo el lucro con quienes tienen como objetivo un servicio esencial. Siempre pierde uno, el que no tiene el objetivo del lucro. 5.000 dólares por un traslado especializado de Bella Unión a Montevideo es un robo a mano armada y una inmoralidad”, enfatizó. Además, dijo que la investigadora ayuda “a defender los recursos de los uruguayos” y deja el camino abierto para “el gran debate de qué sistema de salud queremos”. “Llegaron a decir que la investigadora de ASSE tenía como objetivo privatizar la salud, pero ya no lo dicen más. Y los diputados del FA que van a la investigadora cada vez hablan menos, porque no tienen forma de defender la cosas que denunciamos”, remató.