Ayer la Cámara de Senadores aprobó el proyecto de ley que autoriza al Poder Ejecutivo a enajenar los padrones 6.177 y 7.751, ubicados en el predio conocido como dique Mauá –ubicado frente a la rambla sur de Montevideo y que pertenecía a la ex Compañía del Gas (en la intersección con la calle Andes)–, con el fin de construir un puerto. El proyecto arquitectónico está a cargo del empresario Juan Carlos López Mena, dueño de Buquebus, quien planea invertir 200 millones de dólares en la nueva terminal. El Partido Independiente votó en contra del proyecto, ya que lo considera inconveniente, y el Partido Colorado siguió la misma línea.

El senador colorado Pedro Bordaberry señaló que su partido sí votó la modificación del artículo sexto, ya que “establece garantías de cumplimiento” que le parecieron oportunas. Ese artículo establece que “la enajenación a la que refiere el artículo primero sólo podrá celebrarse bajo la condición resolutoria del cumplimiento de las obras referidas en dicho artículo, objeto de la licitación pública, dentro del plazo que se indique en el pliego licitatorio”.

Ahora el proyecto de ley pasará a consideración de la Cámara de Diputados.