En un año, el Frente Amplio (FA) definirá su programa de gobierno para el período 2020-2025, pero el proceso comenzó ayer, en La Huella de Seregni. Las autoridades de la coalición de izquierda presentaron a una sala repleta de militantes, legisladores y ministros las unidades temáticas programáticas y los planes para la elaboración del programa. Entre otras figuras del Poder Ejecutivo estaban la ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse; la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Eneida de León; el vicecanciller, Ariel Bergamino, y la vicepresidenta, Lucía Topolansky. Al comienzo de la actividad se emitió un material audiovisual en homenaje a los 101 años del nacimiento del histórico dirigente frenteamplista Liber Seregni, que se conmemoraron ayer.

La diputada comunista chilena Camila Vallejo y el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se excusaron de participar en la convocatoria pero enviaron sus saludos y expresaron su admiración por el FA.

El presidente de la comisión de programa del FA, Ricardo Ehrlich, destacó que la coalición de izquierda uruguaya está “inspirando a otros Frentes Amplios” en la región. “Latinoamérica mira a Uruguay como nosotros mirábamos a Cuba”, comentó. Y destacó la unidad frenteamplista, que “termina zurciendo” y superando “líos bárbaros”. “Los frenteamplistas tenemos que cada día desayunarnos con unidad, que volver a afirmar la unidad”, coincidió el presidente del FA, Javier Miranda. “No somos una unidad ideológica, nos desafiamos a ser una unidad programática”, manifestó. Ehrlich recordó que el programa fue “la llave del encuentro de sectores” en el FA y “es la clave de la herramienta política”.

Miranda, Ehrlich y Topolanksy, esta última consultada por la prensa, mencionaron la importancia de incorporar la agenda medioambiental y los cambios en el mundo laboral al próximo programa.

Tamara García, militante frenteamplista de Canelones y otra de las oradoras de ayer, destacó como principios del FA “la lucha por una sociedad más justa”, la “construcción de abajo hacia arriba”, y la capacidad de “articular y discutir de una forma unitaria”. Como debe mencionó la “ausencia de la construcción de un relato sobre los avances que hemos tenido”, y remarcó la necesidad de discutir sobre “los límites del progresismo”.

Las unidades temáticas programáticas, abiertas a quien quiera participar, tendrán tiempo hasta fines de mayo de 2018 para elaborar insumos y propuestas. Entre julio y agosto de 2018, la Comisión Nacional de Programa redactará la propuesta programática 2020-2025 y en setiembre la elevará al Plenario Nacional y comenzarán las discusiones en los comités de base. En diciembre de 2018, la propuesta será considerada por el Congreso del Frente Amplio, que será el encargado de definir la versión final del programa 2020-2025.

Los cinco desafíos

La discusión programática del Frente Amplio se estructurará en base a cinco desafíos, que abarcarán distintos temas. 1. El desafío del desarrollo. Desarrollo económico y política macroeconómica; economía social y solidaria; medioambiente; telecomunicaciones; energía e industria manufacturera y del conocimiento; cadenas agroindustriales; turismo, transporte y logística; desarrollo de recursos acuáticos; innovación, ciencia y tecnología. 2. El desafío de la igualdad y la diversidad. Políticas atendiendo al ciclo de vida (infancia y adolescencia, juventudes y adultos mayores); políticas transversales (género, afrodescendientes, indígenas y migrantes, discapacidad y diversidad sexual); políticas territoriales. 3. El desafío de la integración e inclusión. Vivienda, hábitat y ordenamiento territorial; salud; cultura y derechos culturales; educación; integración socioeconómica; Sistema Nacional de Cuidados; seguridad social; trabajo, empleo y relaciones laborales; deporte. 4. El desafío de la democracia. Integralidad de derechos (derechos humanos, compromiso ciudadano, convivencia y seguridad ciudadana, medios de comunicación); descentralización; sistema democrático y fortalecimiento institucional (papel y estructura del Estado, gestión pública, sistema de partidos y electoral, sistema de justicia). 5. El desafío de la integración regional e internacional. Integración e inserción regional y con el mundo; política migratoria; política de fronteras; soberanía y defensa nacional.