La semana pasada estuvo agitada para el intendente nacionalista de Florida Carlos Enciso. Primero tuvo que hacer frente a la indignación de los floridenses en las redes sociales y los medios tradicionales por la turbiedad de un llamado a choferes que se había mantenido prácticamente oculto. Después contestó molesto, cerrando una conferencia de prensa a viva voz y sin aceptar preguntas, una declaración de la bancada de ediles del Frente Amplio, en la cual los curules decían estar preocupados “por el abultado déficit” de la comuna en el ejercicio 2015 (unos 40 millones de pesos) y por los “varios casos” en los que las liquidaciones de horas extras de la Intendencia de Florida (IF) han superado los límites establecidos por el convenio 30 de la Organización Internacional del Trabajo. Como botón de muestra, recordaron que un funcionario de la administración cobró 63.000 pesos en horas extras. Si bien el sábado se repuso con una promocionada misión de representantes del gobierno de la provincia china de Gansu, el domingo volvieron las tensiones: un tuit del diputado José Andrés Arocena hacía saber, en medio de un asado con militantes de su entorno, que renunciaba “de manera indeclinable” a la Agrupación Manuel Oribe (lista 62) que lidera Enciso. Ese sector del Partido Nacional (PN) en Florida fue liderado durante más de 40 años por el padre del diputado Arocena, el ex intendente Andrés Arocena Noceti, fallecido en 2009.

Mi banca

Arocena es diputado desde 2010, cuando Enciso renunció para asumir como intendente. Hasta ese entonces no había sido mucho más que un militante del sector, había sido colocado como primer suplente de Enciso a Diputados, en medio de un clima de dudas sobre si este último lograría que la 62 mantuviera la mayoría dentro del PN. “Cuando a mí me dicen ‘a vos te pusieron ahí’, yo les digo que me pusieron pero no de regalo. Servía que yo estuviera ahí. La Manuel Oribe no era la agrupación que es hoy. El líder había estado preso, el intendente Giachetto tenía cerca de 70% de aprobación, y Vázquez dejaba la primera presidencia con una aprobación muy alta. Mi persona servía como portador de apellido, además de otras características, como ser un padre de familia serio y responsable y una persona dedicada al trabajo en distintas esferas”, comentó Arocena a la diaria. En 2014 fue electo diputado titular, pero antes tuvo que competir en la interna de la propia agrupación, contra candidatos con cargos en la comuna. “Competí contra cuatro candidatos municipales, con prácticamente todo el aparato de la IF a favor [de ellos]”, recordó. Después de muchas tensiones y cuando desde el entorno de Enciso empezaron a surgir los nombres de posibles candidatos a intendente y ninguno era el suyo, Arocena renunció al grupo pero no a la banca. “Nos retiramos por un agotamiento en las relaciones personales. El relacionamiento ya era casi insostenible. La agrupación se había vuelto un coto de caza de cargos y no un lugar de asuntos políticos”. Además “había una bajada de línea permanente para todo”. Aseguró que en más de una oportunidad mantuvo silencio ante situaciones que le hacían ver que se estaba al límite. “Para un asado de amigos se nos observó que nos habíamos reunido sin haber pedido permiso. Si hago una choriceada, ¿cuál es el tema? ¿A quién le compro los chorizos? ¿Si les pongo mayonesa? Cuando se llega a esas situaciones queda demostrada la intolerancia existente”. Arocena cree que, dado ese escenario, está llamado a fracasar en la 62 todo aquel “que no sea condescendiente” con Enciso. Enciso aseguró que supo de la renuncia de Arocena mediante un tuit. “Me hubiese gustado otro tipo de comunicación [...] Esta agrupación es una gran familia donde, sin romper la unidad partidaria, cada uno puede tomar su camino”, dijo el jefe comunal. “Yo sabía que en algunas cuestiones él tenía cierta autonomía de gestión. Incluso en las audiciones de la agrupación él hacía sus propias apreciaciones”. El legislador le respondió que así como Enciso se enteró por Twitter de su renuncia, él se enteró “por los medios de que se había lanzado un grupo a nivel nacional”. El lunes de noche el Ejecutivo de la Agrupación Manuel Oribe emitió un comunicado en el que le reclamó la banca: “Por fundamentos doctrinarios, ética y valores morales que nos legó nuestro fundador y líder Andrés Arocena [padre], la banca de la Cámara de Representantes, que tras largas luchas electorales hoy posee esta agrupación, ha sido, es y será fruto del trabajo de miles de militantes que han dedicado horas al esfuerzo por esta representación. Reivindicarla como propia, como un derecho personal, es ir contra estos principios morales y fundamentales”. “A la banca me la quedo. No hay discusión sobre eso”, dijo Arocena a la diaria. De todos modos, aclaró, no tendría problema en que sus suplentes, que siguen respondiendo al sector, asuman. No está dispuesto, añadió, a que sea con tiempos predefinidos en un acuerdo de partes. “No soy muy negociador. Eso de cuotificar la banca me lo quisieron imponer en la previa, pero no acepté. Yo no tengo inconveniente en que asuman, en la medida en que tengamos la educación necesaria para mantenernos en los cánones de conducta y urbanismo”, agregó el diputado, que aún no resolvió cómo se llamará el grupo que lidera. La única certeza es que estará dentro del sector Todos, que lidera Luis Lacalle Pou. “Estamos al descampado total. Tenemos el comité móvil”, dijo, en referencia a su vehículo. Insistió en que si se le va a cuestionar el permanecer con la banca porque fue electo por un sector, lo mismo tendrían que haber hecho con Jorge Saravia cuando retornó al PN, y que incluso el propio Enciso hizo algo similar cuando dejó Correntada Wilsonista para pasar a Aire Fresco. “Yo aplaudí las dos decisiones, así que voy a continuar hasta el final del período”.