Los salarios de los trabajadores uruguayos aumentaron en conjunto 11,65% el año pasado, con una leve diferencia superior para los trabajadores estatales, según un comunicado difundido ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Teniendo en cuenta que el nivel de precios alcanzó un crecimiento de 8,1% en igual período, el alza de las remuneraciones en términos reales fue de 3,28%.

Los sectores con mayores aumentos dentro del sector privado fueron los hoteles y restaurantes, la enseñanza y las actividades inmobiliarias y empresariales, mientras que en el ámbito público los más privilegiados fueron los trabajadores del gobierno central y los departamentales.

Dentro del sector privado, las alzas de los distintos rubros variaron entre 10,61% y 16,94%. Los trabajadores con mayores aumentos en sus retribuciones fueron los de los hoteles y restaurantes, seguidos por los de la enseñanza (13,63%), los de las actividades inmobiliarias empresariales y de alquiler (13,29%), los de intermediación financiera (11,73%) y los de comercio al por mayor y al por menor y de la reparación de vehículos y efectos personales (11,53%). En menor medida crecieron los salarios de los empleados de las industrias manufactureras (10,87%), la construcción (10,76%), del transporte, almacenamiento y el área de las comunicaciones (10,74%) y de los servicios sociales y de salud.

En cuanto al ámbito estatal, los más beneficiados fueron los funcionarios del gobierno central, cuyas remuneraciones aumentaron 13,69%, seguidos por los dependientes de los gobiernos departamentales (10,53%) y, en último lugar, los de las empresas públicas (9,33%).

En términos nominales, los salarios en general aumentaron 11,74%: 11,53% en el caso del sector privado y 12,13% en el del público.

“Una muy buena noticia”

Tras conocerse los datos publicados por el INE, el representante de los jubilados y pensionistas en el directorio del Banco de Previsión Social (BPS), Sixto Amaro, convocó a una conferencia de prensa para celebrar lo que consideró una “muy buena noticia”. El crecimiento del Índice Medio de Salarios (IMS) en diciembre fue de 1,06%, lo que implicó un aumento nominal anual de 11,74%, orden en el que aumentaron las jubilaciones y pensiones mínimas y que “supera en 50% las pautas que se fijaron a principio de año”.

Todas las pasividades mínimas otorgadas antes de enero de 2016 recibirán el ajuste de 11,74% y pasarán a cobrar 10.263 pesos (eran de 9.185). Por otro lado, aquellas pasividades mínimas que se otorgaron después del 1º de enero de 2016 y que, por consiguiente, se ajustan a partir de la Base de Prestaciones y Contribuciones (BPC), esta vez en 2,75 unidades, pasarán de 9.185 a 9.930 pesos.

Amaro valoró que el aumento definitivo de las prestaciones sea “3,5% mayor de lo que fue la inflación” y, sobre todo, que se sumen “ya 12 años consecutivos de incrementos” por encima del Índice de Precios al Consumo: “Habla de una recuperación muy importante del poder adquisitivo de jubilados y pensionistas”.

El director del BPS sostuvo que lo ganado es “producto de la negociación colectiva”, ya que “el aumento de salarios de cada sector es lo que posibilita el aumento del IMS y, por ende, el de las prestaciones”. “Vaya entonces nuestro reconocimiento a la flexibilidad que tuvieron las pautas que rigen los Consejos de Salarios sobre fin de año”, agregó.

Los jubilados y pensionistas cobrarán por primera vez el aumento con las prestaciones de febrero, en los primeros días de marzo, cuando, además, se les incluirá el aumento de 10,06% retroactivo de enero.

De cara al próximo incremento, Amaro sostuvo que “ya estamos pensando en julio”, cuando las pasividades se ajustan por el equivalente a un octavo o un cuarto de BPC, y agregó que “naturalmente estaremos peleando para un cuarto”.