Ayer las mujeres volvieron a estar en la calle. Porque volvieron a matar a una mujer por ser mujer. Esta vez a Carmen, de 42 años, que fue asesinada por su pareja en Verdisol el domingo. Y porque ya van cinco en lo que va del año. En el encuentro convocado por la Coordinadora de Feminismos gritaron, se tomaron de las manos y leyeron juntas: “Estamos en la calle porque asesinaron a otra mujer. Porque hay una menos entre nosotros. Porque estas muertes no son incidentes aislados. Ni un caso policial, ni una nota periodística. Esas muertes de mujeres son producto de una violencia estructural, patriarcal y capitalista, que todos los días nos violenta de diferentes maneras. Todos los días y en todos los lugares nos matan. Sabemos cuál es el hilo que une todas estas violencias, por eso nos organizamos para denunciar, visibilizar y autocuidarnos. No nos dejamos solas, porque ninguna nos es indiferente, y todas nos tocan. Porque por cada una que falte estaremos en las calles”.