La Agrupación de Trabajadores de la Meteorología Nacional (ATMN) está en conflicto por las “sucesivas negociaciones infructuosas con los representantes del Poder Ejecutivo” y los “sucesivos directorios” del Instituto Nacional de Meteorología (Inumet) y la ex Dirección Nacional de Meteorología, nombre que tenía antes de 2013, cuando todavía pertenecía al Ministerio de Defensa Nacional (desde entonces está en la órbita del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente).

La negociación tiene tres ejes: equidad salarial (único valor hora); estructura, carrera y carga salarial (reconocimiento y pago de la función) y presupuesto. La asamblea general de ATMN se reunió el lunes y emitió un comunicado en el que se detallan las idas y vueltas que ha habido en los últimos siete años para corregir las inequidades salariales, que están todavía sin resolver.

“Meteorología estuvo ocho años sin tener asignado un nuevo presupuesto; en consecuencia, su estructura, ya en ese entonces vetusta, devino en paupérrima, por atraso en tecnología, falta de reposición y actualización de equipos, con instrumentos que tenían décadas sin ser calibrados y con estructuras edilicias desmoronadas y en condiciones de total abandono, lo que repercutió en que las condiciones laborales eran deplorables, llegando a situaciones como que la observadora meteorológica de la estación de Trinidad llegara a juntar el agua contaminada del baño y la estación para poder cumplir con su función, porque tuvo durante mucho tiempo las cloacas tapadas”, expresa el comunicado. Pero eso no es todo; denuncian las inundaciones que padecían y padecen todavía varias estaciones meteorológicas, que no cuentan con servicio de limpieza y mantenimiento ni con agua potable, por lo que los observadores tienen que acarrear bidones desde sus domicilios, aunque algunos viven a 50 o 100 kilómetros. Debido a eso, tienen que ir “varios kilómetros a campo traviesa, de madrugada y en situaciones de riesgo como la que se produjo en la estación de Colonia, donde compañeros fueron atacados por jaurías de perros; todo esto ha sido denunciado oportunamente y nunca obtuvimos respuesta”, explican. La Ley de Presupuesto Quinquenal 2015-2020 les dio esperanzas: el rubro Remuneraciones incorporaría 20 millones de pesos en 2016 y 35 millones a partir de 2017; el de Funcionamiento, cinco millones de pesos el primer año y 15 millones en los siguientes; para Inversiones se daría un aumento de diez millones de pesos en 2016 y 15 millones a partir de 2017. Los trabajadores lamentan que en diciembre de 2015 se devolvieron a Rentas Generales por concepto de Remuneraciones 35 millones de pesos y que en diciembre de 2016 volvieron a devolverse 65 millones de pesos. Por eso concluyen que el presupuesto de la Inumet fijado en la Ley de Presupuesto “es algo así como ‘una caja de ahorro’ del MEF [Ministerio de Economía y Finanzas], que en los sucesivos períodos de no cumplir con los compromisos con los funcionarios, pago de la función, reparación de inequidades (único valor/hora por escalafón y por grado), partida por alimentación, partidas de compromiso de gestión, reestructura, carrera y su carga salarial, el Estado ahorra, mientras se les quita salario a los trabajadores”, y denuncian además que “el salario sólo tuvo las modificaciones de los ajustes de enero 2016-2017”. En las negociaciones, el Ejecutivo propone que reciban por única vez una partida de 15% de lo que se devuelve a Rentas Generales, pero ATMN pide además 12% para corregir los salarios mínimos, con lo que se devolverían 47 millones y no 65. Denuncian que de las partidas para 2017 se recortaron diez millones de pesos de remuneraciones, 15 millones de funcionamiento y otros 15 millones de inversiones. Por todo esto, consideran que hay un “doble discurso del gobierno entre lo que dice y las políticas que aplica, que reafirman su desinterés por el desarrollo de la Meteorología en nuestro país; a modo de ejemplo, somos los únicos en América Latina que no contamos con radar meteorológico para nuestro territorio”.