Tras cinco años de cerrar con pérdidas, la presidenta de ANCAP, Marta Jara, aseguró ayer en una conferencia de prensa en la que presentó el balance de 2016 que la empresa pública está saneada en términos financieros y la tendencia se consolida en 2017. “Estamos muy contentos porque el resultado es de 15 millones de dólares [a favor], que incluye los costos financieros y todos los efectos contables”. No obstante, no se aventuró a anunciar una baja en el precio de los combustibles. “Estamos siendo exitosos en lograr tener en claro los temas que explican la gestión ya realizada; en cuanto a las proyecciones, seguimos afinando las herramientas”, aseguró. Jara agregó que existen muchas variables, como el precio del crudo y el tipo de cambio, por lo que no están en condiciones de compartir las proyecciones ni la paramétrica. “Es muy difícil adelantarnos, pero quisiera que quede claro que nuestro compromiso es lograr una estabilidad financiera para luego ver las tarifas”, afirmó.

La presidenta de ANCAP calificó de exitosa la gestión de la deuda, ya que se bajaron las tasas de endeudamiento; “eso tiene que trasladarse en un alivio a futuro. Hemos cumplido 75% de todos los compromisos planteados con el Poder Ejecutivo”.

Jara señaló que un punto que demandó mucho esfuerzo fue reorganizar el portafolio. “La refinación es un negocio robusto y medular. El portafolio de ANCAP está muy diversificado, con empresas que dan ganancias y otras que dan pérdidas. Lo importante es reasignar recursos para tener actividades que estén más cerca de lo que sabemos hacer bien y de los mercados en los que tenemos una ventaja; eso nos lleva a tomar decisiones de ir desprendiéndonos de ciertos activos menos estratégicos”, explicó.

Las de DUCSA, Alur y Cementos del Plata son las actividades centrales, a las que se suma la del gas natural. Las empresas vinculadas al suministro del gas están atadas a la concreción de la regasificadora y a cómo se logran nuevos acuerdos con Argentina para exportar. “No queda duda de que es un energético con el que estamos comprometidos”, afirmó Jara.

Desde la empresa se aseguró que se trabajará en el equilibrio del negocio del pórtland. “Estamos apostando a mantener las tres plantas abiertas, pero vemos imprescindible una racionalización de los costos para lograr, en dos años, equilibrar los números”, dijo la presidenta del ente. Jara señaló que durante 2016 se evaluó la situación y “se manejó la posibilidad de hacer inversiones, pero se descartó porque el mercado uruguayo no logra justificarlas. Los mercados de exportación son altamente competitivos, con precios y volúmenes inciertos”. Jara dijo que, si bien ANCAP no se va a retirar del negocio del supergás, debe cambiar el modelo.

En la conferencia también se mencionó una deuda de 108 millones de dólares con la Dirección General Impositiva (DGI). Sobre este punto la presidenta de ANCAP afirmó que “a raíz de las denuncias, pedimos una inspección a la DGI y se corroboró que se habían liquidado todos los impuestos; tampoco se detectó otro tipo de irregularidad. Lo que se constató es un retraso en la liquidación de impuestos, que generó multas y recargos, ya que hablamos de muchos años, y se generó esa multa de 108 millones de dólares”. La deuda se arrastraba desde 2006, pero se acordó con la DGI por medio de un acuerdo de pago.