Uno de los argumentos utilizados por el oficialismo para defender el decreto firmado por el presidente Tabaré Vázquez que faculta a todos los organismos públicos a participar en la disolución de cortes de calles y rutas es que sirve para prevenir un eventual lock-out patronal que podría poner en peligro la cosecha récord de soja y arroz. “El Frente Amplio [FA] cuenta con un pueblo movilizado y en las calles para defender todos los avances en materia de conquistas sociales, pero para defender el modelo agroexportador es más complicado movilizar a la gente, creo que para eso es mejor apostar a la Policía”, reconoció una alta fuente del Poder Ejecutivo. El decreto recibió varias críticas desde la interna de la izquierda, pero también fue atacado desde la derecha. El senador del Partido Nacional y ex candidato a la presidencia Luis Lacalle Pou aseguró que gobernantes como el presidente Tabaré Vázquez, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, “nos están dejando sin medidas de derecha para tomar cuando volvamos al poder”. El líder nacionalista explicó que en las reuniones que se hacen para “preparar la vuelta” se están previendo “grandes dificultades para entrar pegando fuerte y marcando la diferencia con respecto del gobierno anterior, tomando medidas como declarar esencialidades, prohibir piquetes o atacar a defensores de los derechos humanos. Los políticos del FA están perdiendo los códigos. ¿Qué quieren, que nosotros nos pongamos a pedir la abolición de la propiedad privada?”.