Buena parte del discurso de Vázquez estuvo dedicada a relatar con cifras los resultados de los 12 años que el país lleva de gobiernos frenteamplistas: el mandatario comparó los resultados del país en áreas como la educación, la salud y la economía de los últimos años con los que existían antes de que el Frente Amplio (FA) asumiera o durante los primeros años de su gobierno. Por ejemplo, y entre decenas de comparaciones que hizo, destacó que la mortalidad infantil bajó de 12,7 por cada 1.000 nacidos en 2005 a 7,8 en 2015; que la repetición en las escuelas públicas descendió de 10,3% en 2002 a 5% en 2015; que el salario real creció 50% desde 2005 a la fecha, y que el salario mínimo lo hizo en términos reales 261%. El tema seguridad fue una de las pocas áreas en que las comparaciones refirieron exclusivamente a su segundo gobierno: Vázquez destacó que los homicidios bajaron 9,6% en 2016 respecto de 2015, y las rapiñas descendieron 3,7%.

Otros datos que también refirieron exclusivamente de su segundo período de gobierno fueron las inversiones en obras públicas de 2016, que alcanzaron 272,5 millones de dólares, las 22.666 viviendas “dignas” que el gobierno ha terminado en estos dos últimos años (y las 20.365 “en ejecución”), y las tabletas entregadas por el Plan Ibirapitá, unas 102.000 en 2016, a las que se sumarán 75.000 más en 2017. En tanto, Vázquez también destacó la importancia del “gobierno de cercanía” que promueve, y enumeró como un dato de su gestión los 16 Consejos de Ministros realizados en el interior del país, 12 de los cuales se llevaron adelante en 2016.

También dejó en claro la importancia de que el país desarrolle el Sistema Nacional de Cuidados, y dijo que al final de su mandato, en 2020, el gasto anual en esta política será de 240 millones de dólares al año. “Más caro sería no tenerlo”, aseguró.

Respecto de la economía, Vázquez recordó que en su cadena abierta de 2016 se señaló la situación compleja que atravesaba la economía del país. Entre las prioridades, rememoró que el gobierno se propuso “controlar y bajar la inflación; disminuir el gasto público no prioritario, sin afectar las políticas sociales; el control y cumplimiento de las empresas fijadas a las empresas públicas; lineamientos en la negociación salarial que permitieran cumplir con estos objetivos sin afectar el poder de compras de las familias, y mantener el grado inversor para poder seguir creciendo”. Sostuvo: “Hoy podemos decir que logramos todos los objetivos y el país se encuentra en una situación diferente”.

Luego, tras hablar prolongadamente del Plan Ceibal, Vázquez deslizó, sin profundizar demasiado, que el gobierno ratifica el “compromiso” presentado en el programa de gobierno de “tender a llegar al 6% del PIB con destino a la educación”.

Otro asunto en el que hizo énfasis fue el Plan Nacional de Infraestructura, por el cual el gobierno planea realizar obras por más de 12.000 millones de dólares, con fondos públicos y privados. Sobre las relaciones internacionales, dijo que el gobierno tiene un “compromiso” con el Mercosur, con el que se buscará “avanzar” en un acuerdo con la Unión Europea y “otros países del mundo”. Entre ellos mencionó a China, destacando la relación de “asociación estratégica” que ambos países acordaron, y dijo que espera que esto “permita avanzar en la firma de un Tratado de Libre Comercio” entre Uruguay y ese país.

Vázquez pareció dirigir varios mensajes a la oposición: “No hay que desvelarse tanto por las próximas elecciones y hay que pensar más en las próximas generaciones”, dijo en una parte de su discurso. Luego ratificó que el gobierno que él dirige quiere que se apruebe la Rendición de Cuentas, y dijo que tiene “confianza” en que su “tratamiento en el Parlamento será responsable”.

La aprobación de este proyecto de ley y la reforma de la Caja Militar, sostuvo, serán las prioridades del equipo económico. En el Ministerio del Interior se ampliará el Programa de Alta Dedicación Operativa y el sistema de vigilancia por todo el país. El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca trabajará para sancionar el proyecto de ley de riego, mientras que el Ministerio de Desarrollo Social se enfocará en la implementación del Sistema Nacional de Cuidados, y el Ministerio de Salud en la “profundización” del Sistema Nacional de Salud. En tanto, el Ministerio de Educación y Cultura priorizará que la totalidad de los egresados de primaria cursen el ciclo básico de enseñanza media, un área en la que, sostuvo, es necesario reunir esfuerzos, dado que es una de los más problemáticas. Respecto del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, dijo que este año se propondrá “lograr el Plan Nacional de Aguas y dejar encaminado el Plan Nacional Ambiental”.

El discurso de Vázquez no pasó inadvertido a muchos uruguayos. Por medio de las redes sociales se organizó un cacerolazo a la hora de la cadena que logró ser bastante ruidoso en algunos barrios de Montevideo.

Contradiscurso

El nacionalista Jorge Larrañaga aprovechó la oportunidad para cuestionar no sólo al actual gobierno, sino a los 12 años de administración frenteamplista. El senador recordó que cuando era oposición, el FA no votó el Tratado de Protección de Inversiones con Finlandia, pero hoy es la “salvación”, porque “no generaron nada en estos 12 años”. Según dijo, el FA en su momento sostuvo “grandes discursos contra las inversiones de empresas transnacionales que quedaron en la nada”, y mientras tanto “el inversor nacional, el pequeño y mediano productor y el empresario uruguayo continúan sin respuestas, con un Estado lento, pesado y caro, que siempre busca instrumentos para llegar a sus bolsillos”. Además acusó a las administraciones frentistas de “dilapidar la bonanza” y tirarla en “inversiones ruinosas” y “negocios vergonzosos”. “Se prometieron 12.500 millones de dólares en un Plan de infraestructura que seguimos esperando”, recordó. A pesar de las críticas, destacó que el FA atendió la “emergencia originada en 2002”, pero dijo que “serían inhumanos si no lo hubieran hecho”. Aseguró que “no son los únicos que hubieran rescatado a los compatriotas. Esa es parte de la mentira que han generado. ¿Acaso si no hubiera ganado el FA en 2004 piensan que nosotros hubiéramos dejado a la deriva a los uruguayos?”.

Para Larrañaga, “en estos 12 años los gobernantes frentistas se empacharon de poder, incumplieron y ahora flotan en un mar embravecido, sin planes, sin norte, aferrados a su tabla de salvación, sólo pensando en ellos mismos y sólo queriendo mantenerse en el poder”. Hoy será el turno de Luis Lacalle Pou, que le propondrá una batería de medidas al gobierno.