Por intermedio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Ministerio de Salud (MS) compró 600.000 dosis de vacunas antigripales. En conferencia de prensa, el ministro Jorge Basso explicó ayer que esta vacuna protege de los tres virus más frecuentes que circularon en el último invierno en el hemisferio norte: dos del tipo A (H1N1 y H3N2) y uno de tipo B. Subrayó que “es un objetivo sanitario de primer orden” lograr la mayor cobertura en los grupos más vulnerables frente a infecciones respiratorias: niños que tengan entre seis meses y cuatro años; mayores de cinco años y adultos que tengan enfermedades crónicas o un sistema inmunitario más comprometido; mayores de 65 años y embarazadas (en cualquier etapa del embarazo e incluso en el puerperio, para proteger a su bebé). Basso aclaró que únicamente está contraindicada para bebés que tengan menos de seis meses y para personas alérgicas al huevo y sus derivados, puesto que es un ingrediente empleado en la elaboración de la vacuna. Además de los colectivos mencionados, el MS insta a que se vacunen trabajadores de la salud, policías, bomberos, militares y otros grupos de trabajadores que estén en contacto con público. Según una nota publicada por la OPS en Uruguay, el ministro dijo que en 2016 Uruguay alcanzó una cobertura de más de 60% en el personal de la salud, pero no fue un porcentaje alto en embarazadas, niños y adultos mayores, de los que se vacunaron sólo entre 30% y 35%.

El MS lanzó la campaña tempranamente, con el objetivo de lograr la mayor cobertura posible antes de la llegada de los días más fríos, dijo Basso. “Es el dinero mejor gastado previo al invierno para lograr disminuir la prevalencia de enfermedades respiratorias. Con estos cambios de temperatura bastante bruscos, ya estamos teniendo en las consultas médicas los primeros episodios de cuadros respiratorios, sobre todo en niños; las clásicas bronquiolitis”, cuya frecuencia, advirtió, será mayor a medida que descienda la temperatura. La vacuna tarda unos 15 días en proteger de la influenza. Previendo aglomeraciones durante los primeros días, aclaró que no es necesario “salir corriendo”.

Hay más de 400 puestos de vacunación en instituciones de salud públicas y privadas. Cualquier persona puede ir a cualquiera de ellos y vacunarse sin costo. Además, equipos de vacunadores concurrirán a algunas policlínicas y a hogares de ancianos, y se podrá concurrir, también, al móvil de la Comisión Honoraria de Lucha Antituberculosa y Enfermedades Prevalentes. Este será el primer año en el que el MS llevará un registro informático de las personas que se vacunen contra la gripe, lo que, según Basso, permitirá generar una base de datos.

Cada vacuna le costó al Estado “algo más de tres dólares”, declaró Basso. Se compraron por intermedio del Fondo Rotatorio de la OPS, un mecanismo de cooperación solidaria que permite comprar a precios reducidos, tal como reseña ese organismo en su sitio web. Además, permite la compra a un precio único, sin importar el tamaño del país, lo que, para Uruguay, es muy beneficioso.