La búsqueda de nuevos recursos económicos para financiar el cumplimiento del programa del Frente Amplio (FA) de cara a la próxima Rendición de Cuentas es moneda corriente en varios sectores del oficialismo, y en la interna de la fuerza política comienzan a aparecer diferentes propuestas para introducir herramientas que permitan aumentar la recaudación impositiva y llegar a objetivos como el de la asignación de 6% del Producto Interno Bruto para la educación o la implementación total del Sistema Nacional de Cuidados. En ese marco, desde el 4 de abril el grupo frenteamplista Ir, cuya figura más visible es la diputada Macarena Gelman, viene desarrollando una fuerte campaña en las redes sociales para que se apruebe un impuesto a la herencia, que el sector considera uno de los principales factores que contribuyen a la desigualdad de oportunidades.

Gonzalo Salas, economista perteneciente a Ir, explicó que la iniciativa ya había formado parte de la campaña electoral del sector de cara a las elecciones de 2014. Luego, en el debate del año pasado dentro de la última Rendición de Cuentas aprobada por el Parlamento, los legisladores oficialistas se reunieron para buscar nuevas formas de financiamiento público, y entre las propuestas que se barajaron, Ir volvió a introducir el impuesto a la herencia, aunque finalmente no fue tenido en cuenta en esa oportunidad. “Esta vez salimos con la propuesta más elaborada”, dijo Salas.

Según explicó este economista, actualmente existe un Impuesto a las Transacciones Patrimoniales, que sólo grava un tipo de herencia, las transacciones de bienes inmuebles, y con una tasa baja. La idea es sustituir ese tributo por un “verdadero impuesto a la herencia”, que sea “más amplio en los activos que vaya a gravar” y que contemple un mínimo imponible “que no sea bajo, de unos 150.000 dólares al menos, pero que las tasas luego sean progresivas y crecientes a medida que el monto de la herencia sube”.

Salas también explicó que este gravamen dependería de los montos heredados de las personas. “Si en algún momento recibís una herencia por un monto bajo, es posible que no tengas que tributar por esa herencia, pero luego, si te surge una nueva herencia que te permite superar el mínimo no imponible, ahí deberías empezar a pagar el impuesto: es el acceso de la persona a la herencia lo que se grava”. Según ilustró, si la herencia de una persona se divide en varios familiares, la tributación se realizará en función de lo que reciba cada uno de los herederos y no del valor total de lo que se reparte.

El sector publicó una columna en Montevideo Portal, en la que establece que la herencia “es una fuente de riqueza en la que el esfuerzo no juega ningún papel en su generación, ya que es originada en la lotería en la que todos participamos al nacer y de la que muy pocos logran obtener beneficios”.

Dónde y qué se discute

Esta y otras propuestas serán motivo de análisis de dos comisiones encabezadas que la bancada de parlamentarios viene llevando adelante de cara al proyecto de ley de Rendición de Cuentas. En ese ámbito ya ha comenzado a funcionar una comisión que estudia las exoneraciones impositivas, y se espera que después de Semana de Turismo haga lo mismo la comisión que estudiará la posibilidad de que se creen nuevos impuestos. Sin embargo, según dijo el diputado Alfredo Asti, es posible que termine siendo el mismo grupo el que analice ambos temas.

La comisión de exoneraciones está integrada por sectores del FA, representantes del Ministerio de Economía y Finanzas y de Presidencia. En la primera reunión se les pidió a los integrantes del Poder Ejecutivo que profundizaran sobre la información con la que cuenta el gobierno respecto de las exoneraciones impositivas que actualmente recibe la educación privada y de los beneficios fiscales relacionados con la Ley de Promoción de Inversiones.

Según el diputado Luis Puig (Partido por la Victoria del Pueblo), desde 2011 hasta la fecha, el Estado ha dejado de recibir en el entorno de 1.350 y 1.800 millones de dólares por exoneraciones tributarias al capital. Su sector viene proponiendo no sólo revisar estas exoneraciones, sino volver a estudiar varios tributos, como el impuesto al patrimonio, el Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE) y “el tema de la herencia, que entra en los aspectos que deberían reconfigurarse en la ecuación”. De no hacerse esto, asegura, “los números no dan y tampoco hay condiciones de seguir gravando los impuestos al trabajo”.

Otro sector que viene estudiando el posible impuesto a la herencia es el Partido Comunista del Uruguay (PCU), aunque según dijo su diputado, Gerardo Núñez, todavía no existe una postura al respecto. El PCU también insiste con el Impuesto al Patrimonio, más concretamente, con revisar las exoneraciones a este tributo. Además, reclama revisar la exoneración de IVA del que gozan los juegos de azar. “No vemos que haya una necesidad del país para fomentar este tipo de actividades”, opinó Núñez.