Lo dicho, en distintas circunstancias, por las dos principales figuras del PIT-CNT -su presidente, Fernando Pereira, y Abdala- estará en cuestión en la sesión de hoy del secretariado. Pereira encabezó la delegación de la central a Israel, acompañado por el secretario de Relaciones Internacionales de esta organización, Fernando Gambera; el presidente de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercios y Servicios, Fabio Riverón, y Tatiana Antúnez, del Departamento de Jóvenes del PIT-CNT.

Tras el viaje, los dirigentes fueron entrevistados en Montevideo Portal por la periodista Ana Jerozolimsky, directora del Semanario Hebreo, y algunas de sus declaraciones llamaron la atención. Gambera sostuvo que la situación que se vive en Israel “no es comparable al apartheid, donde había claramente, por razones de raza o de color, una exclusión de una mayoría, incluso, de todo el sistema democrático, de todo el sistema de decisión y participación”. Se trata, aseguró, de una “comparación que, desde el punto de partida, es equivocada”.

Pereira, por su parte, se refirió a Israel como “un país que ha logrado niveles estándar de calidad de vida aceptables para sus trabajadores”, quienes tienen “convenios colectivos por aquí y por allá”, y han conseguido “-a pesar de los distintos cambios que se produjeron en Israel- tener una organización potente en muchos sectores de la sociedad”. “Yo parto de la base de que si analizás con tranquilidad y claridad el mapa del mundo, donde hay sindicatos potentes hay derechos laborales, a la seguridad social, de los jóvenes, hay derechos humanos”, agregó.

En tanto, Antúnez dijo que le impresionó mucho “ver jovencitos y jovencitas armados que hacen un servicio militar obligatorio”, aunque, a la vez, resaltó cómo esta realidad se entrevera “con la educación en diferentes valores que tienen que ver con la comunidad, la solidaridad, que son las cosas que nosotros como jóvenes nos queremos llevar y queremos transmitir”.

Sobre el final de la entrevista, los dirigentes manifestaron su oposición a un boicot contra productos israelíes impulsado por la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios en mayo del año pasado. Además, Gambera sostuvo que “cualquier país que se precie de democrático dirime las cosas como lo hace Israel”. “Una de las cosas que me parece que nos da esta experiencia es que se afirma la presencia y convivencia aquí de gente, algo que hemos podido vivenciar inclusive en reuniones en las que participamos. Se reafirma que esa sería una línea por la que puede pasar una solución: la convivencia. Es muy fácil enunciarlo verbalmente y más desde Uruguay, y vivir en Israel y padecer, es otra cosa. Me di cuenta de que hay una realidad que impone que estén a la defensiva y que se cuiden”, sostuvo. Sin embargo, también señaló: “Pero el que haya colonos y un muro que ha dividido familias, visto desde afuera por alguien como yo, es una actitud ofensiva, no defensiva”.

Las críticas no tardaron en aparecer. Joselo López, secretario general de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE) e integrante del Secretariado, dijo ayer a El Observador que tiene dudas sobre la postura de la central sindical de ese país frente a “esas cuestiones que generan tanto drama en esa región”, y sostuvo estar convencido de que Israel “es un Estado belicista y que, sobre todo con Palestina, tiene una postura intransigente”. A algunos de estos cuestionamientos se sumó el dirigente ferroviario Ricardo Cajigas, también integrante del Ejecutivo del PIT-CNT y perteneciente a la Lista 41 de la central sindical, al igual que López. Si bien aseguró a ese medio que lo dicho por los dirigentes no se contradice con la actitud del movimiento obrero de apoyo a Palestina, también sostuvo que algunas de sus declaraciones no reflejan el “parecer de muchos compañeros del movimiento obrero”.

Ayer, Cajigas explicó a la diaria que esperará el informe que sus compañeros harán hoy sobre el viaje, antes de sacar conclusiones. “Lo que he escuchado por ahora son las versiones de una periodista, pero siempre tengo una gran desconfianza hacia los artículos periodísticos. Te toman una declaración de diez minutos y extraen uno o dos minutos y no ponen cosas que dijiste. Tres o cuatro cosas sacadas de contexto pueden dar una idea equivocada”, dijo al respecto.

Otros dirigentes le bajaron el perfil a la situación. Carlos Cachón, de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea, entendió que el PIT-CNT debe mantener una postura de “autodeterminación de los pueblos” tanto frente a Palestina como frente a Israel, y destacó la libertad de la central de reunirse con otros sindicatos del mundo “manteniendo el respeto hacia la paz”. “Hay que tratar a este país con el mismo respeto con el que tratamos a Venezuela”, interpretó. Un poco más lejos fue Fernando Ferreira, de la Federación de Empleados y Obreros de la Bebida, que afirmó: “Si uno va invitado por una confederación de trabajadores, se supone que es un intercambio entre trabajadores, y hasta ahí todo bien, pero después, con la opinión sobre el Estado de Israel, creo que tenemos algunos matices con los compañeros”.

No pasó desapercibido

Mucho más duros fueron los comentarios llegados de varias federaciones de sindicatos palestinos, que, conjuntamente, emitieron una carta (a la que adhirieron, además, otros gremios de todo el mundo, incluidos algunos uruguayos, como la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria y la Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Montevideo), en la que manifiestan su sorpresa ante la visita por invitación del Histadrut, “uno de los más activos promotores y defensores de las violaciones de Israel a la ley internacional”. “Además, nos ha decepcionado profundamente el saber que algunos de sus directivos han estado defendiendo públicamente las políticas de apartheid, colonización y ocupación de Israel, negando su existencia y atacando el movimiento mundial no violento de boicot, desinversión y sanciones [BDS] por los derechos de los palestinos”. Según la carta, el Histadrut apoya “las masacres contra la población en la ocupada y sitiada Franja de Gaza” y “permite a los colonos judíos ilegales en la Cisjordania ocupada unirse a la organización”.

Respecto de la estrategia de BDS, la carta recuerda que ha recibido el apoyo expreso de varios sindicatos de Sudamérica, como la CTA de Argentina y la CUT de Brasil, e incluso también de sindicatos miembros del PIT-CNT y de organizaciones locales como el Servicio Paz y Justicia, la Asociación de Ex Presos Políticos de Uruguay y la Federación de Estudiantes Universitarios de Uruguay (FEUU). “Mientras tanto, la dirección del PIT-CNT parece ir en sentido contrario, no sólo ignorando el llamamiento palestino al BDS, sino también trabajando activamente para socavar nuestro movimiento por la libertad, la justicia y la igualdad”, se sostiene. La carta culmina pidiendo al PIT- CNT que atienda “nuestra petición de realizar acciones solidarias no violentas a través de BDS”, y a no participar en una actividad que se iba a llevar adelante hoy junto al Comité Central Israelita del Uruguay (CCIU), en el que los dirigentes que fueron parte del viaje iban a contar su experiencia en Israel. El encuentro finalmente quedó “postergado para otra ocasión”, informó el CCIU en un comunicado, “por motivos organizativos”. Según dijo a El País Israel Buszkaniec, presidente de esta organización, la charla “probablemente” se realice en mayo.

De haberse llevado a cabo la actividad hoy, la situación podría haber sido tensa. El encuentro iba a realizarse en el Centro Maimónides a las 19.00, pero un mensaje hecho viral por Whatsapp convocaba a una manifestación en el lugar y a esa hora, contra las expresiones de los dirigentes del PIT-CNT.

También se debate

Además del informe de la delegación que viajó a Israel, los integrantes del Secretariado recibirán un resumen de Abdala sobre su viaje a Venezuela. Sus declaraciones habían causado ruido entre varios integrantes del Secretariado, a tal punto que ese organismo optó por evitar declaraciones demasiado específicas sobre el país caribeño en la sesión del martes 4 de abril. “Evidentemente, en el tema Venezuela no tenemos la misma opinión, y eso se trasluce en la declaración”, había dicho Ferreira a la diaria tras ese encuentro. Luego de esa reunión, varios dirigentes respaldaron al gobierno de Maduro, mientras que otros cuestionaron el “viraje” del mandatario venezolano.