A pesar de las críticas que habían generado, el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT decidió respaldar los informes de los viajes que hicieron a Israel y Venezuela sus principales autoridades: su presidente, Fernando Pereira, y su secretario general, Marcelo Abdala, respectivamente. Tanto sobre el conflicto israelí-palestino como sobre la crisis política e institucional que vive Venezuela, la central decidió abrir la cancha y procesar un debate más a fondo, y por eso invitará a académicos y expertos para dar una discusión más profunda en ambos temas.
Pereira y Abdala dieron la cara tras la sesión del Secretariado Ejecutivo en una conferencia de prensa en la que explicaron sus respectivos viajes. Pereira, por ejemplo, dijo que el PIT-CNT tiene vínculos con la Histadrut, la Confederación General de Trabajadores de Israel, desde los años 60, y explicó que a ese sindicato le plantearon los postulados de la central sobre el conflicto israelí-palestino (por ejemplo: que debe existir un proceso de paz que implique “dos estados”, y que las respuestas militares de Israel a Palestina son desmesuradas”). Según aseguró, la Histadrut manifestó compartir esas perspectivas con el PIT-CNT, marcando una fuerte diferencia con el gobierno de Israel. El miércoles, varias federaciones de sindicatos palestinos habían emitido un comunicado en el que criticaron el viaje del PIT-CNT y aseguraron que la Histadrut es “uno de los más activos promotores y defensores de las violaciones de Israel a la ley internacional”.
Tanto Pereira como otros dirigentes coincidieron en que lo que generó más polémica no fue el viaje que hicieron los dirigentes a Israel, sino las declaraciones que hicieron a algunos medios, como Montevideo Portal. “La entrevista tuvo algunos elogios para el Histadrut, por ejemplo, [por elhecho de] organizar a los trabajadores de McDonald’s. Pero no hubo ninguna reunión con el Estado de Israel. Hubo temas polémicos, pero no hemos modificado en lo más mínimo la postura del PIT-CNT” sobre eltema, aseguró Pereira. El presidente de la central agregó que hay diferencias que “no van a ser laudadas hasta que no haya una discusión de fondo”. Para eso, la central se propone dar un debate profundo sobre el tema, trayendo a “personas especializadas” e incorporando “distintas visiones”. Según Pereira, es necesario “tener la tolerancia de escuchar a personas que piensan diferente y convalidar posiciones históricas del movimiento sindical”.
En una misma línea que Pereira, el dirigente de la Federación Nacional de Municipales, Daniel Urquiola, explicó a la diaria que algunos temas de la discusión quedaron “abiertos”, para ser discutidos en un “espacio con catedráticos y especialistas, porque entendemos que nos faltan elementos para llegar a una definición de consenso”: “Hay diferentes visiones sobre este tema y las realidades van cambiando, pero a muchos nos faltan elementos”. Uno de los temas que causó más polémica fue el de si existe una situación de apartheid en Israel, una tesis negada por Pereira en la entrevista a Montevideo Portal pero sostenida por otros, como el dirigente ferroviario Ricardo Cajigas, presente en el Secretariado.
No obstante, la central no se privó de hacer algunos comentarios en su declaración, ratificando “el derecho del pueblo palestino a constituir un Estado independiente”, y reclamando “el fin de las agresiones del gobierno israelí sobre el mismo, respetando los Derechos Humanos y la autodeterminación del pueblo palestino”. En la declaración del PIT-CNT los dirigentes apostaron a basarse en las definiciones de su último congreso, que es cuando se establecieron los postulados generales sobre el tema.
Venezuela y Maduro
El viaje de Abdala tampoco pasó desapercibido. La declaración del PIT-CNT deplora los “hechos de violencia” y los atribuye al “imperialismo yanqui y la oligarquía venezolana que tiene como objetivo principal apoderarse nuevamente de las riquezas que genera el pueblo venezolano, nacionalizadas por el gobierno del presidente [Hugo] Chávez en su momento en beneficio del pueblo”. Además, se reclama que la Organización de Estados Americanos debería jugar un papel para “desarrollar una política dirigida a estabilizar la democracia existente en Venezuela”.
La posición sobre Venezuela, dijo Abdala, “es la misma que [la central] ha tenido históricamente”, y esta “no se pronuncia sobre cada uno de los actos del gobierno, pero solidariza con el proceso bolivariano que ha distribuido la riqueza petrolera y quiere diversificar la matriz productiva entre vastísimos sectores del pueblo”.
Abdala aseguró, incluso, que participó en una movilización de la oposición y que nunca dijo que Venezuela fuera “el paraíso”. Sostuvo que hay “mucha inconformidad” con el gobierno de Maduro. No obstante, “muchos medios muestran imágenes de la movilización chavista de hoy como si fuera de la oposición: hay una campaña de los medios de comunicación de Latinoamérica que distorsiona la realidad”.
Según pudo saber la diaria, el propio Abdala reconoció durante el informe que hizo al Secretariado que no había querido decir que estaba representando a todo el PIT-CNT cuando apareció en el programa de televisión Los domingos con Maduro, junto al presidente venezolano, lo que le valió críticas de otros dirigentes de la central que son más críticos con el mandatario.
Urquiola dijo que el PIT-CNT hace una “valoración muy positiva” del proceso de la revolución bolivariana, y que el apoyo expresado por Abdala se enmarcó en ese respaldo, aunque admitió que en ese país “hay una crisis institucional, económica, política y cultural, de difícil solución”, cuya salida es “apostar al diálogo y a las elecciones”: “Hay que encontrar la manera de ponerse de acuerdo y con elecciones, pero respetando hasta el último día a un gobierno que ha sido elegido democráticamente, como el de Maduro”. Según explicaron otros dirigentes del Secretariado, en este tema también se tomó la decisión de profundizar el debate con la visión de académicos y expertos.