La fiscal letrada departamental de Colonia, Darviña Viera, pidió que sea archivada una denuncia presentada por ediles frenteamplistas de Colonia en 2015 contra el ex intendente nacionalista de ese departamento, Walter Zimmer, por la compra, 20 días después de concluir su mandato, de una camioneta de alta gama que hasta pocos días antes de la operación había pertenecido a la comuna. La fiscal Viera consideró que no hubo delito pero sí “desprolijidades”.

Tras una licitación a la que se presentó sólo la empresa Ajax, en 2012, la Intendencia de Colonia compró una camioneta Toyota Land Cruiser Prado V6 pagando el precio CIF (costo, seguro y fletes) en 54.900 dólares. El gasto fue observado por el Tribunal de Cuentas de la República (TCR) pero el entonces intendente Zimmer lo reiteró. Una de las condiciones previstas en la licitación era la entrega de una nueva camioneta, a cambio de la usada, en caso de haber transcurrido tres años o que el cuentakilómetros de la camioneta llegara a 100.000. Pero Ajax ofreció hacer el cambio en 2013, cuando tenía recién un año de uso. Zimmer aceptó, lo cual también fue observado por el TCR. El entonces intendente reiteró el gasto argumentando que la operación no implicaba erogación alguna. En 2014 pasó lo mismo: Ajax ofreció cambiar la camioneta independientemente de que recién había transcurrido un año de la entrega de la anterior, y que el vehículo no había recorrido 100.000 kilómetros. El nuevo recambio, sin embargo, no estaba previsto en la licitación. De hecho, los ediles denunciaron que esa última operación “no fue sometida a los procesos correspondientes del TOCAF [Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera]”. Ante la iniciativa de Ajax, Zimmer aceptó. La empresa entregó una nueva camioneta. Sobre la usada, la intendencia tramitó una cartapoder para enajenarla así como para realizar la transferencia de la titularidad, la cual -según concluyó la fiscal a raíz de la investigación- fue entregada a Ajax. A 20 días de concluido su mandato, Zimmer compró la camioneta por 63.900 dólares.

Papeleo

Según la denuncia de los ediles, la carta poder extendida por Zimmer cuando aún era intendente autorizaba “a María Alejandra Frachelle Jourdan y/o Roque Néstor Pensado Rodríguez a ‘empadronar, asegurar, enajenar, solicitar duplicado de libreta, realizar transferencia de la titularidad, recibir el precio, otorgar recibo’ respecto de la camioneta”, la cual “en realidad debió haberse entregado a AYAX SA en virtud de la adquisición de la nueva camioneta modelo 2015”. Fue el 29 de julio de 2015, “20 días después de haber asumido el nuevo Intendente Dr. Carlos Moreira, que Walter Zimmer compró a la Intendencia de Colonia -representada a los efectos por María Alejandra Frachelle Jourdan en virtud de la carta-poder que el mismo Walter Zimmer había otorgado el 28 de mayo ejerciendo funciones de Intendente- la camioneta que la comuna había adquirido en 2013 a través de la permuta que había previsto la licitación abreviada efectuada en 2011”. En la denuncia los curules afirmaron además que Zimmer compró la camioneta en 63.900 dólares, pero ese dinero “nunca ingresó” a la intendencia. Y añadieron: “Zimmer no estaba habilitado a contratar con la Intendencia de Colonia según lo dispuesto por el numeral 4 del artículo 487 de la ley 15.903”.

Según el dictamen de la fiscal Viera, la camioneta sí fue entregada por la intendencia a Ayax. Lo que hubo, según la representante del ministerio público, fue “una desprolijidad administrativa, o en todo caso no hay una transparencia en el negocio jurídico, no guardando estrictamente las formas para realizar el contrato de la camioneta recientemente entregada por la intendencia” a la firma Ayax. Señaló incluso que si Zimmer no pagó a la intendencia por la camioneta fue “porque no correspondía”, ya que el vehículo “en los hechos pertenecía a Ayax”. “A juicio de la fiscalía no hubo efectiva lesión a un bien jurídico, que en este caso sería la administración pública”.

El doctor Gastón Chávez, quien junto a Gustavo Borde representó al ex intendente ante la Justicia, dijo a la diaria que lo que hizo Zimmer al extender una carta poder “es lo mismo que se hace en cualquier automotora” al venderle un auto a cualquier persona. “No le dicen ‘vamos a hacer el título’, porque es una pérdida de tiempo y es un gasto inútil, ya que a ese auto la automotora lo va a vender a los cinco minutos. ¿Para qué hacer un título intermedio si con un simple poder alcanza?”.

Sin embargo, para el TCR -según un informe de junio de 2016- “en oportunidad de la segunda permuta se debió otorgar la transferencia y título definitivo del vehículo entregado por la Intendencia a favor de AYAX SA, y no otorgar una carta poder que constituye una mala praxis habitual en la materia”.

Chávez, no obstante, cree que “hubo un tema de formalidades”. “Sí, hubo. Pero si se quería hacer algo con intención torcida, no se hubiera hecho de esa forma. Sobre todo esto se construyó toda una novela que terminó donde tenía que terminar: en el archivo”, dijo Chávez, en relación al pedido de la fiscal Viera por no encontrar méritos suficientes.