La Ley 18.211, del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS), se aprobó en diciembre de 2007. Se acerca la hora del balance de esta década, y en ese contexto es que el Ministerio de Salud (MS) lanza hoy las jornadas de intercambio tituladas “A diez años de iniciada la reforma sanitaria. Evaluación y desafíos del Sistema Nacional Integrado de Salud”. Según lo anunciado, asistirán el equipo ministerial, representantes de los usuarios, de los trabajadores, de jubilados, del ámbito académico y de las instituciones de salud.

Ayer, previo al lanzamiento, la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) convocó a una conferencia de prensa. “Para nosotros era importante poder transmitir el lanzamiento del diálogo social en salud, algo que la FUS está impulsando y reclamando para avanzar en los aspectos que hacen falta en la reforma”, explicó a la diaria Eolo Mendoza, secretario de organización del Consejo central de la FUS. El 10 de marzo el sindicato le había pedido al ministro Jorge Basso que convocara a un diálogo nacional, y le entregó un documento que contenía ocho puntos a trabajar. El sindicato había presentado esa petición en medio de la preocupación por los casos de estafa al Fondo Nacional de Salud (Fonasa). Mendoza enumeró los principales puntos: fortalecer la rectoría del MS, mejorar el control económico y financiero de las instituciones de salud, acortar los tiempos de espera, rever las políticas de medicamentos, y hacer una “verdadera” complementación de servicios entre las instituciones que conforman el SNIS, puesto que hasta ahora, según la FUS, sólo se da la venta de servicios entre el sector público y el privado. Además, la FUS critica el gasto en publicidad de las mutualistas, que sólo en enero, y sin contar con la inversión que acompaña la apertura del corralito mutual cada febrero, había sido de 118 millones de pesos; la federación entiende que eso es “una desviación de fondos del Fonasa” y propone destinar ese dinero a ampliar la canasta de prestaciones o a terminar con el pago de órdenes y tickets.

El ministro no le había respondido a la FUS sobre los planteos, pero “la respuesta llega ahora”, dijo Mendoza. Se mostró expectante frente a cómo se desarrollará el diálogo. Además, señaló que “es importante ver cuáles serán los contenidos que el Poder Ejecutivo le va a dar al diálogo y quiénes van a ser los otros actores que van a intervenir”, y consideró que no debería ser únicamente una instancia en donde se haga el anuncio “y luego no se le den contenidos profundos”.