El canciller Rodolfo Nin Novoa encabezó un debate del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre protección a civiles en conflictos armados, que se llevó adelante a iniciativa del gobierno uruguayo.
Uruguay preside este organismo durante mayo, e impulsó este debate a un año de que el Consejo de Seguridad aprobara una resolución en busca de paliar los ataques contra hospitales y personal sanitario, que no ha tenido resultados significativos en países que actualmente viven conflictos internos, como Siria, Afganistán, Sudán del Sur o Irak.
El ministro pidió que se ejerza un mayor control sobre el comercio internacional de armas, y dijo que los “ataques más devastadores son los efectuados por vía aérea”. En ese aspecto, recordó que en ninguna de las guerras actuales las fuerzas rebeldes cuentan con flota aérea propia. “Quienes sí tienen fuerzas aéreas son los estados involucrados en los conflictos; por consiguiente, la responsabilidad primaria recae sobre dichos Estados”, dijo, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Efe.
El canciller cuestionó directamente a las potencias que tienen un cargo permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia), al citar un estudio en el que indicaba que entre 2011 y 2015 estos países suministraron 75% del total de las exportaciones de armas. Nin insistió en que la comunidad internacional tiene como “obligación” identificar y castigar a los culpables de los ataques a civiles, sostuvo que los estados miembros deben garantizar investigaciones sistemáticas de este tipo de ataques y que el Consejo de Seguridad debe imponer sanciones a los responsables o elevar los casos a la Corte Penal Internacional.