La situación interna de Venezuela ha sido motivo frecuente de debates en el Parlamento uruguayo, tanto en interpelaciones como en sesiones y reuniones de comisión. En cambio, no han gozado de la misma atención los convenios internacionales de cooperación con ese país, en particular, los acuerdos en materia de desarrollo social y de defensa. Firmado en 2013 por el gobierno de José Mujica, el convenio de cooperación en defensa entre Uruguay y Venezuela no fue abordado por el Parlamento en el período pasado y tampoco en este, pese a que la iniciativa ingresó en abril de 2015 a la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Representantes.

Al igual que otros acuerdos de cooperación en materia de defensa que Uruguay ha firmado con todos los países de América del Sur, excepto con Colombia, y con varios europeos, el acuerdo bilateral con Venezuela habilita intercambios en áreas de capacitación y entrenamiento del personal, cooperación en ciencia y tecnología en el sector de defensa, y apoyo logístico en el ámbito técnico-militar. Asimismo, crea un grupo de trabajo encargado de redactar convenios específicos, integrado por los ministerios de Defensa de ambos países.

Una demora incluso mayor en su aprobación sufre el Convenio para el Desarrollo Social entre Venezuela y Uruguay, suscrito en diciembre de 2005. Durante el primer y segundo gobierno del Frente Amplio (FA), la iniciativa se envió al Parlamento, pero no fue aprobada. En marzo de 2015, el gobierno de Tabaré Vázquez volvió a enviar el acuerdo, sin suerte hasta el momento. El convenio dispone en su exposición de motivos la necesidad de “estrechar la cooperación en el área de la economía popular y el desarrollo social” mediante “el intercambio de propuestas relacionadas con los sectores socioproductivos, financieros, de formación y capacitación”. En particular, contempla el apoyo de Venezuela a la formación y capacitación de cooperativas, y el establecimiento de un “Núcleo de Desarrollo Endógeno binacional” de “potencial agrícola” en Pueblo Bolívar, en el departamento de Canelones. “Los Núcleos de Desarrollo Endógeno constituyen una experiencia ya desarrollada en la República Bolivariana de Venezuela, que se traduce en el intento de convertir los recursos naturales en productos que puedan ser consumidos, distribuidos y exportados a todo el mundo. Dicha experiencia se basa, entre otros valores, en el respeto al medioambiente y las relaciones equitativas de producción, mediante la construcción de redes productivas que cuenten con una amplia participación en igualdad de condiciones y fácil acceso a la tecnología y el conocimiento”, detalla el proyecto.

Los legisladores del FA que integran la comisión sostienen que la oposición no tiene la voluntad de aprobar estos acuerdos y que, por “delicadeza”, el oficialismo está aguardando para poner sobre la mesa su consideración. El diputado del Partido Nacional Nicolás Olivera afirma, en cambio, que su partido no está trancando los acuerdos. “La decisión de postergar los asuntos es de consenso de toda la comisión, nosotros no estamos bloqueando nada”, aseguró.

De todos modos, Olivera opinó que no sería conveniente “desde el punto de vista institucional” aprobar estos acuerdos en estos momentos, y en particular el acuerdo de cooperación en defensa, por “la situación que está viviendo Venezuela”. “No es un momento oportuno, y menos para hablar de defensa”, consideró el legislador.