La primera manifestación en la calle de los sindicatos estudiantiles y de docentes copó ayer la avenida 18 de Julio. Entre tres y cuatro cuadras de personas caminaron desde la explanada de la Universidad de la República (Udelar) hasta la Torre Ejecutiva, en la plaza Independencia, que las recibió rodeada de vallas. La marcha rumbeó para la calle Colonia a la altura de Paraguay, para pasar por el Ministerio de Economía y Finanzas y dedicarle algunos cantos a Danilo Astori.

Entre los caminantes, la amplia mayoría eran jóvenes. Se veían banderas de gremios liceales, de los distintos centros de estudiantes que forman parte de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU), banderas de sindicatos de la Agremiación Federal de Funcionarios de la Udelar (AFFUR), de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria, de la Unión de Trabajadores del Hospital de Clínicas, de los gremios de estudiantes de las carreras del Consejo de Formación en Educación, de la Asociación de Trabajadores de Enseñanza Secundaria, de la Asociación Uruguaya de Egresados Terciarios de la Educación Pública –que reclamaban en su pancarta la reforma del Fondo de Solidaridad–, y hasta se vieron dos banderas de la Corriente Gremial Universitaria. Todo el camino fue entre cantos, bombos y bengalas, y al llegar a la Torre Ejecutiva la protesta fue directa: “Ahí están, estos son, los que hunden la nación”, cantaron.

En la calle los distintos gremios tomaron el micrófono. En representación de la Intergremial Universitaria hablaron Federico Kreimerman, integrante del Consejo Directivo Central (CDC) de la Udelar por el orden de Egresados, y el dirigente de AFFUR Alcides Garbarini. Kreimerman lamentó constatar, conocidos los datos de la Rendición de Cuentas, que “una vez más el presupuesto educativo está siendo postergado”, y graficó que los 12 millones de dólares que el Poder Ejecutivo prevé como aumento del presupuesto de la Udelar significan “menos de una décima parte de lo que la universidad pidió por un año”. El representante de los egresados también planteó la eliminación del Adicional del Fondo de Solidaridad, y reclamó “recursos presupuestales” para cubrir esos aportes a la Udelar. Ante quienes plantean que “está bien” que los universitarios aporten por el beneficio que les significó la enseñanza terciaria, respondió que ese argumento “es ver a la educación como un bien de mercado, y la educación pública es un derecho por el que no hay que pagar”. Garbarini afirmó que con la movilización de anoche “abrimos un período de conflicto”, en el que “las marchas, las ocupaciones, los paros estarán a la orden del día, porque peleamos por presupuesto para la educación pública”. Además, los gremios universitarios se manifestaron en contra del proyecto de participación público-privada (PPP) para refuncionalizar el Hospital de Clínicas, y convocaron a concurrir al CDC el 27 de junio, día en que se discutirá seguir con el procedimiento previsto por la ley de PPP.

Luego dos estudiantes de secundaria y UTU leyeron una proclama de los gremios estudiantiles, en la que reclamaban por acceso a toda la oferta educativa en los distintos puntos del país; materiales educativos; grupos de 25 personas; mejoras en la formación docente; la creación de equipos interdisciplinarios en los centros de estudio, y salarios dignos para los docentes y funcionarios. Sobre el final de su intervención, manifestaron con énfasis el repudio por “la infiltración de la Dirección de Inteligencia Policial en el corte de calle del viernes pasado”.

También leyeron una proclama dos estudiantes de las carreras de Formación en Educación, que se quejaron porque el gobierno “no da prioridad a la educación pública, mientras las empresas que lucran con la educación siguen recibiendo exoneraciones”. Las estudiantes afirmaron que además este año es clave no sólo por la Rendición de Cuentas, sino por “la presunta creación de la Universidad de Educación a espaldas del movimiento estudiantil organizado”, y reclamaron que en esa institución se conforme el cogobierno de base “integrado por los cuatro órdenes en paridad”.

La encargada de cerrar la oratoria fue Sofía Kohn, militante de la FEUU, que reclamó por “turnos para que los estudiantes puedan trabajar y los trabajadores puedan estudiar”, y por la eliminación de los cupos, que este año dejaron fuera de la Udelar a 7.000 personas, según afirmó la estudiante de Medicina. También pidió por guarderías para que las madres puedan continuar con sus carreras y por más horas docentes por estudiante: “Queremos cosas tan simples y justas como poder entrar a estudiar”. Kohn vaticinó que con el ritmo de los aumentos a la educación “se va a llegar al 6% en 2035”.

“Enorme preocupación”

La Asociación de Docentes de la Udelar (ADUR) estaba entre las organizaciones que convocaban a la marcha anoche, pero no tuvo a ningún representante en la oratoria. En un comunicado divulgado ayer, ADUR manifestó su “enorme preocupación” por “los anuncios de un aumento muy reducido para la educación para el año 2018”, porque lo destinado a la Udelar “dista mucho del pedido formulado” tanto por la universidad como por el gremio, y porque se proyectó el presupuesto a un año, “cuando la mejora de nuestro sistema educativo requiere poder planificar a mediano y largo plazo”. Si bien reafirman que tienen voluntad de diálogo, aseguran que eso “no nos impedirá tomar las acciones gremiales que sean necesarias para defender la educación pública”.