A pedido del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, declaró la esencialidad de los servicios de importación, producción, distribución y comercialización “de todos los combustibles en todo el país, públicos y privados, incluyendo los que se provean a través de empresas contratadas a terceros”. La resolución establece que “los servicios esenciales referidos” deberán ser prestados bajo el control, dirección y responsabilidad de ANCAP. Poco antes de la firma de la resolución, la titular del MIEM, Carolina Cosse, explicó en rueda de prensa los motivos de la solicitud: “Al no haber podido arribar a una solución, y sobre todo con la situación de desabastecimiento que hay hoy, le solicité un informe a la presidenta de ANCAP [Marta Jara] sobre la situación real, para estar al día, y es una situación realmente preocupante”. “Entendemos que, en vista de los sucesos climáticos que han tenido lugar en Uruguay, hay una cantidad de compatriotas que están siendo afectados por este desabastecimiento y que realmente no tienen nada que ver con el problema”, agregó. La ministra puntualizó que el gobierno tiene que “atender los riesgos de salud” y sostuvo que 90% de los hogares que usan gas licuado de petróleo “lo usan para cocción y para calefacción”. “Estamos ante una situación que amerita la esencialidad”, enfatizó.

Cosse también anunció que Jara resolvió “el reordenamiento, la reorganización del trabajo, la redefinición de las guardias y de los turnos y de las formas de operación, de forma de que ANCAP no quede sujeta a la realización de horas extras para el cumplimiento de sus cometidos”.

La ministra explicó que las horas extras se hacían “no porque se trabajara fuera de horario”, y puso como ejemplo que “para hacer un trabajo que estaba definido” había cuatro personas en un turno; si “una persona no se presentaba, entonces la cuarta persona debía ser convocada en calidad de hora extra”. “Vamos a volver a la normalidad. Acá el objetivo principal es cuidar la salud y el bienestar de los uruguayos, y que ANCAP cumpla sus cometidos”, concluyó Cosse. La resolución dice que la esencialidad continuará hasta que finalicen las medidas gremiales.

La falta de combustible comenzó a sentirse el jueves de la semana pasada como consecuencia de medidas gremiales tomadas por la Federación ANCAP (FANCAP) tras el anuncio del Poder Ejecutivo de eliminar, a partir del 30 de junio, el servicio médico que el ente brinda a los trabajadores. Como respuesta al decreto del Ejecutivo, los nucleados en FANCAP suspendieron las horas extras en la planta de La Tablada, medida que se extenderá hasta el 21 de junio, cuando se lleve a cabo la siguiente asamblea general.

Entrega parcial

En la mañana de ayer, las estaciones de servicio comenzaron a recibir de manera parcial el combustible. La entrega de ayer se limitó a la nafta súper, mientras que no se suministró gasoil ni premium. Daniel Añón, presidente de la Unión de Vendedores de Nafta, dijo a la diaria que la entrega fue a medias, porque no todos los puntos de venta recibieron lo que habían pedido, ni en cantidad ni en productos. “ANCAP tiene que buscar una solución a esto rápidamente; ya la tendrían que haber buscado las autoridades, porque estamos pasando una situación económica y financiera compleja. ANCAP tiene la obligación de suministrar combustible”, subrayó. Recalcó que un ingrediente extra es que llegan clientes del interior a Montevideo a cargar combustible. Manifestó que el problema de abastecimiento se terminará cuando “arreglen lo de La Tablada”.

Por su parte, Edwin Villero, presidente de FANCAP, subrayó en diálogo con la diaria que el sindicato mantendría durante toda la semana la medida de no hacer horas extras en la entrega de combustible, pero ayer efectuaron una extensión horaria de la guardia gremial, “lo que permitirá salir de la situación” en algunas de las estaciones de servicio. El dirigente sindical remarcó que no han recibido nuevas propuestas del Poder Ejecutivo con respecto a la decisión de suprimir el servicio médico, y añadió que el gremio está a la “espera de alguna convocatoria del gobierno para avanzar en una solución definitiva a una de las conquistas históricas de los trabajadores de ANCAP”.

Mientras tanto, en el Consejo de Ministros ampliado realizado en el Cuartel de Blandengues en la mañana de ayer, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, manifestó que respaldaría el accionar del MIEM para garantizar el abastecimiento de los combustibles ante las medidas tomadas por el sindicato de ANCAP. “Tomaremos las medidas que tengamos que tomar para que a los uruguayos no les falten los combustibles ni elementos de calefacción”, aseguró Vázquez. No obstante, no especificó ninguna medida concreta ni dijo de qué tipo sería.

Fin de semana seco

la diaria recorrió algunas estaciones de servicio de Montevideo para verificar el suministro efectuado en horas de la mañana y que, en algunos puntos de venta, se estaba realizando pasado el mediodía. En términos generales, los puntos de venta de combustible estaban recibiendo sólo nafta súper y en volúmenes que oscilaban entre 40% y 50% de lo solicitado y de lo necesario para operar con normalidad, y en algunos casos, menos, con entregas de 20% de lo normal. Las estaciones no recibieron ayer ni gasoil ni nafta premium, y estimaban que lo que tenían les daría para trabajar el día de hoy y tal vez mañana de mañana.

Asimismo, como consecuencia de la falta de suministro, algunas estaciones estaban racionando la venta, limitándola hasta 1.000 pesos o menos de nafta por cliente; otras tomarían esa medida de acuerdo a cómo fueran las ventas.

Todas las estaciones visitadas habían recibido combustible por última vez el viernes de mañana. La mayoría había quedado sin nada en la tarde de ese mismo día y pasaron todo el fin de semana con los surtidores vacíos. Algunas, chicas, optaron por cerrar y mandaron al personal para la casa.