La Comisión de Tenencia Responsable y Bienestar Animal (Cotryba) informó el viernes que diseñó el Programa Nacional de Gestión de la Población Canina, que “se enfoca en disminuir la población de perros en Uruguay a niveles que no representen un riesgo para el país desde el punto de vista sanitario ni económico, así como diseñar instrumentos esenciales para promover su bienestar y tenencia responsable”. El programa implica, entre otras medidas, “castraciones masivas y registro obligatorio” de perros.

“No existe ese programa, porque no tiene financiamiento; por lo tanto, simplemente es una expresión de deseo”, dijo a la diaria el veterinario Gastón Cossia, diputado suplente por el Partido Nacional. Señaló que en sus dos años de existencia, la Cotryba “no hizo nada”: “No castró un perro, no puso un microchip ni impulsó una campaña de difusión ni de adopciones”. Además, observó que si bien el artículo 87 del proyecto de ley de Rendición de Cuentas establece que 60% de lo recaudado por patentes de perros –cuando se superen las 120.000– por la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis va a ser destinado a la Cotryba, hace más de diez años que no se supera esa cifra, por lo que “es imposible pensar que la Cotryba vaya a tener dinero” por esa vía.

La semana pasada, el titular del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Tabaré Aguerre, dijo que en Uruguay hay 1.750.000 perros, una cantidad “totalmente desproporcionada”, por lo que debería “generarse un mecanismo” para retener a los perros a los que no se les coloca el chip para registrarlos. En ese marco, el jerarca fue consultado acerca de si la solución era volver a la “perrera” y contestó que “el problema es que la perrera interpretada como una máquina de exterminar perros era una equivocación”, ya que se trataba de “un instrumento que ponía orden en la sociedad cuando un animal no tenía un tenedor responsable, y se lo alojaba en algún lugar”.

Cossia opinó que Aguerre “no tiene idea” del tema. “Él es arrocero: si tiene malezas en sus campos, le falla la máquina y saca las malezas. Él se cree que los perros son malezas, y no es así, es vida animal a la que tenemos que proteger. Pero, además, no puede decir que va a retirar a los perros de la vía pública y se los va dar a una protectora [de animales], porque todas ellas están sobresaturadas de trabajo y son organizaciones no gubernamentales privadas que no reciben el más mínimo apoyo del Estado”, señaló.

También fue crítico con Aguerre Juan Echavarría, de Animales sin Hogar, quien dijo a la diaria que por más que se capture a todos los perros y se los pueda mantener en “perreras bien entendidas”, no disminuirá la población de animales, ya que la solución es llevar a cabo “campañas masivas y obligatorias de castración”.

Por último, Cossia se preguntó cuántos chips va a comprar el MGAP “para colocar en los barrios vulnerables”. “¿Quién va a ir al Marconi a ponerles los chips a los perros? ¿Quién les va a dar los microchips a las protectoras de animales que tienen miles de perros? Eso es lo que tenemos que conversar. ¿Quién va a financiar las 170.000 castraciones gratis que tenemos que hacer? Porque en el mundo está estudiado que para que haya una reducción de la población canina, por lo menos hay que hacer 10% de castraciones masivas gratuitas a lo largo de un año”, concluyó.