La central sindical reclama respeto a la negociación colectiva, mayor inversión pública, desarrollo industrial, más salario y trabajo, y la asignación de 6% del Producto Interno Bruto (PIB) para la educación. En esta oportunidad, la consigna del paro general de 24 horas es “El estancamiento trae retroceso”.

El secretario general del PIT-CNT, Fernando Pereira, dijo a la diaria que este paro es necesario para que la gente tome conciencia de la importancia del presupuesto educativo para “mejorar el salario de maestros, profesores y funcionarios, y para regularizar a las auxiliares contratadas por las comisiones de fomento”. El dirigente sindical dijo que también implica darle seriedad a la negociación colectiva, sobre todo en el sector público. Como se reclama desde hace años, el PIT-CNT pide que se destine 6% del PIB a la educación, porque “los maestros de primer grado cobran 26.000 pesos y los funcionarios cobran 21.000”.

Otro aspecto fundamental es el empleo y “cómo se construye el trabajo de calidad a partir de la inversión privada y pública. Este punto está claramente vinculado al de la educación. Cada vez es más claro que para acceder a un trabajo de calidad es necesario tener niveles de educación formal, profesional, técnica e incluso terciaria. El desempleo entre [los que tienen] educación terciaria es muy bajo, pero casi se multiplica por seis en contextos desfavorables. Es el caso de los hombres y las mujeres jóvenes, y el de las mujeres jefas de hogar”.

Otra reivindicación es que se agilicen la implementación de la ley de empleo para personas con discapacidad, el fondo de insolvencia patronal y la reglamentación de la nocturnidad. “Consideramos que han tenido algunos niveles de avance pero, como las vemos muy congeladas, tratamos de mover el avispero”, dijo Pereira.

Una de las discrepancias que el movimiento sindical mantiene con el Poder Ejecutivo es que la ley de Rendición de Cuentas se envió al Parlamento diez días antes de que venciera el plazo establecido. Pereira sostuvo que la decisión fue apresurada y no permitió el diálogo. “Sólo se negoció diez días. Yo lo veo como un portazo a la negociación colectiva. Si un convenio en el sector privado dura entre cuatro y seis meses, que se crea que en el sector público se puede hacer en diez días es desmesurado. Además, distan 60 años de experiencia entre los privados y los públicos”, aseguró.

Pereira predijo un dilema a futuro en torno al cumplimiento de las metas del presupuesto destinado al gasto social: “O se ponen más impuestos a los poderosos aumentando el Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas [IRAE] y el Impuesto al Patrimonio, o, sencillamente, no se va a cumplir con las cuestiones sociales, que son importantes para los sectores más populares”, dijo. Sobre el aumento de la tasa consular aseguró que el PIT-CNT prefiere “otra clase de impuesto, más allá de que cubrir el presupuesto actual es imprescindible. No creo que el cambio sea sustancial, pero no es el que hubiéramos elegido”.

Destacó que el paro del jueves respetará los servicios esenciales, para “no poner en peligro la salud o la seguridad de la gente”.

En movimiento | La Unión Nacional de Obreros y Trabajadores del Transporte (UNOTT) informó que en esta oportunidad acompañará el paro. Los ómnibus urbanos saldrán por última vez a las 19.29 del miércoles, mientras que los suburbanos tendrán sus últimas salidas entre las 17.10 y las 19.29. El servicio se normalizará con los primeros nocturnos del jueves. A pesar de la adhesión de los trabajadores al paro, la empresa COPSA informó que dispondrá un servicio de emergencia durante las 24 horas. CUTCSA tendrá servicio de emergencia desde las 6.30 del jueves.