El vicepresidente de la República y premio Nobel de genética mundial, Raúl Sendic, había acusado al senador Luis Alberto Heber de gastar 220.000 dólares en viajes y viáticos, como cuando acusan a un niño de romper un florero y contesta: “Pero él rompió dos”. En la sesión de la Cámara de Senadores del martes, Heber tuvo su descargo: “¿Cuestiona mi actuación en la Unión Interparlamentaria? ¿El gasto que yo hice? Si es un error, tiene la oportunidad de decirlo. Si es un cuestionamiento, cuestióneme”. Es fundamental imaginarlo dicho con la voz de Heber.

La respuesta de Sendic no se hizo esperar, sobre todo porque estaban uno frente al otro, y reconoció el error de haber cuestionado los gastos.

Al escuchar estas declaraciones, el presidente Tabaré Vázquez habló con su vice y le rogó que deje de haberse bullying solito. “Lo que vemos es que se pega uno, se pega otro, se levanta en el aire y, cuando cae, se vuelve a pegar”, dijo Tabaré. “Es el autobullying más fantástico que he visto en mi vida”, comentó.