Una vez más, los datos estadísticos confirmaron la tendencia a la baja de los precios al consumo percibida desde febrero de este año. De acuerdo con un comunicado difundido ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios al Consumo (IPC) creció 0,32% en julio, lo que implicó un aumento de 4,66% en los primeros siete meses, una cifra muy inferior a los acumulados a esta altura del año en los últimos cinco anteriores.

Los rubros con mayor incidencia al alza a nivel nacional fueron los de alimentos y bebidas no alcohólicas, salud, restaurantes y hoteles, y recreación y cultura, con aumentos de 0,43%, 0,88%, 0,82% y 0,96% en cada caso. En cuanto a los alimentos, se explicó por subas en pan y cereales y en la carne, mientras que los precios de legumbres y hortalizas bajaron. En tanto, el incremento de los precios de la salud se debe a aumentos en medicamentos (0,66%), odontólogos (1,79%) y en las emergencias médicas móviles (2,81%). El alza de los precios de restaurantes y hoteles se debió principalmente a subas en bebidas fuera del hogar (0,62%), comidas a base de carnes y pescado (0,79%) y de harinas (0,87%), y en el caso de recreación y cultura se explicó por aumentos en club deportivo y gimnasio (1,08%), televisión por cable (1,47%) y excursiones (2,62%). Otros rubros que aumentaron sus precios en julio fueron los de bebidas alcohólicas y tabaco (0,32%), vivienda (0,19%) –por subas en alquiler de vivienda principal–, muebles, artículos y productos para el hogar (0,3%) y educación (0,69%).

En tanto, los precios de prendas de vestir y calzado bajaron 0,83%; los de bienes y servicios diversos, 0,34%; y los de transporte, 0,15%, principalmente por los descensos en los precios del gasoil (6,17%) desde el 24 de junio, del ómnibus local (1,48%) debido a la baja del boleto urbano en Montevideo con tarjeta del Sistema de Transporte Metropolitano, y de los pasajes de avión (1,87%).