Ayer el Sindicato de Trabajadores de Tienda Inglesa (Sitti) cortó el ingreso del público a todas sus sucursales. El conflicto surgió a raíz de la suspensión de más de 20 trabajadores por negarse a capacitar a nuevos cajeros tercerizados, dijo a la diaria el secretario general del Sitti, Ariel Britos.

Según Britos, dado que varios trabajadores no concurrirán a trabajar hoy, los dueños de Tienda Inglesa habían decidido “contratar a trabajadores tercerizados” para cubrir a quienes no se presentaran a cumplir sus tareas. De esta forma, “la empresa pidió opcionalmente” a las cajeras que capacitaran a estos nuevos trabajadores y “más de 20” se negaron. Esto generó que Tienda Inglesa “sancionara a esos compañeros”, que reaccionaron con un paro, “trancando la entrada a todas las sucursales”, describió el representante del sindicato. La sanción que Tienda Inglesa había puesto a los trabajadores que no quisieron capacitar era una suspensión, es decir, impedirles concurrir a trabajar “por unos días”.

Lo que el sindicato reclamaba a cambio de levantar las medidas era que se quitaran las suspensiones y que fuera opcional la capacitación a los trabajadores tercerizados. Alrededor de las 9.30, los responsables de la empresa decidieron levantar todas las suspensiones en una negociación con la delegada de las cajeras en la sucursal central de Tienda Inglesa. Con esta decisión el conflicto se disolvió y se retornó al funcionamiento normal de los supermercados.