La Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) anunció que esta semana podría tomar medidas si no se aprueba en la Cámara de Diputados el aumento presupuestal necesario para regularizar a 1.013 auxiliares de servicio que trabajan en todas las escuelas del país, en tareas de limpieza o en el cuidado de niños de tres a cinco años. Actualmente los auxiliares son contratados por las comisiones de fomento, para lo que los directores de las escuelas deben crear una empresa junto a un representante de la comisión para hacerlo. Los auxiliares de servicio contratados de esta manera trabajan media hora más que los auxiliares de servicio presupuestados de la ANEP, y ganan menos; ayer el dirigente de la FUM Fernando Pereira dijo que su sueldo estaba “en los 12.500 pesos líquidos”. “Situaciones de tamaña injusticia tienen que sensibilizar al poder político y al Parlamento en particular”, dijo ayer Pereira en la sede del PIT-CNT.

El Consejo Directivo Central de la ANEP introdujo el tema en su proyecto de Rendición de Cuentas, bajo la estimación de que regularizar a los auxiliares de servicio implicaría 333 millones de pesos para 2018. Tanto los diputados oficialistas como los de la oposición han manifestado que este tema es una de las prioridades a cubrir en esta Rendición de Cuentas; los diputados de la oposición plantearon destinarle 300 millones de pesos, mientras que la bancada oficialista barajaba la posibilidad de destinar menos recursos, en el entendido de que ANEP informó que no todos los auxiliares de servicio están en condiciones de regularizar su trabajo, y que habría distintas vías para hacerlo. “Tienen que ingresar las 1.013 funcionarias. Si no están en condiciones, entonces ¿por qué están adentro de las escuelas y reciben las partidas?”, se preguntó la secretaria general de la FUM, Elbia Pereira.