Tras seis horas de negociación, todos los partidos, con excepción de Unidad Popular (UP), lograron un acuerdo para designar con mayorías especiales a los cinco nuevos integrantes de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH).

El Frente Amplio (FA) consiguió la aprobación de cuatro de los cinco nombres que propuso; quedó fuera de la selección el actual director de la INDDHH, Juan Raúl Ferreira, que aspiraba a la reelección y era el quinto en el orden de prelación de la lista propuesta por el FA. Se designó en cambio, por 124 votos, al abogado Wilder Tayler, propuesto por el Instituto de Estudios Legales y Sociales del Uruguay, por el Servicio Paz y Justicia y por el Centro de Archivos y Acceso a la Información Pública. También a la jueza Mariana Mota, propuesta por Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos y respaldada por el PIT-CNT y organizaciones feministas y de defensa de los derechos humanos, quien obtuvo 120 votos. La abogada Josefina Plá, respaldada por Gurises Unidos y por el Centro Latinoamericano de Economía Humana, tuvo 119 votos, y el actual integrante de la INDDHH Juan Faroppa –propuesto por la asociación de familiares de migrantes Idas y Vueltas y la Red de Amigos de Luis Pérez Aguirre– obtuvo 116 votos.

La quinta integrante del Consejo Directivo designada fue Mariana Blengio, a propuesta del Partido Nacional. La candidatura de Blengio había sido presentada por los diputados nacionalistas Gustavo Penadés, Gloria Rodríguez y Alejo Umpiérrez. Blengio es docente universitaria y fue coordinadora de la cátedra UNESCO de Derechos Humanos de la Universidad de la República.

La designación de Blengio tuvo resistencias internas en el FA, que explicaron la demora en la negociación. El Partido por la Victoria del Pueblo (PVP) no quería votar su candidatura, y se inclinaba por mantener la de Ferreira. “El que planteó que no estaba de acuerdo fue el diputado Luis Puig [del PVP]”, dijo a la diaria el coordinador de bancada, el diputado Jorge Pozzi.

Hubo una primera ronda de votación, en la que todos los partidos, con excepción de UP, votaron a Tayler, mientras que el resto de los nombres no obtuvieron las mayorías especiales requeridas de dos tercios. Pero al alcanzarse esas mayorías en un nombre, eso habilitó una segunda ronda de votación. Después de seis horas, los partidos lograron ponerse de acuerdo y designar por mayorías especiales a todo el Consejo Directivo.

El único que no votó los nombres acordados fue UP. El diputado de ese partido, Eduardo Rubio, explicó a la diaria que estaba mandatado a votar por Mota, Ferreira, el profesor Óscar Destouet y la abogada Marina Morelli, y así lo hizo en la primera ronda. En la segunda ronda, al quedar fuera de la votación Destouet y Morelli porque obtuvieron menos de cuatro votos en la primera ronda, UP votó por Juan Raúl Ferreira y por Mota.

El diputado del Partido Independiente Iván Posada consideró que el hecho de que los partidos hayan alcanzado mayorías especiales en este tema es “una señal de madurez política”.