Ayer la localidad de Nuevo Berlín (Río Negro) fue el escenario de un nuevo Consejo de Ministros Abierto. A diferencia de otras oportunidades, y dado que faltan pocos días para que se cumpla la mitad del actual período de gobierno, el presidente Tabaré Vázquez empezó con un repaso de los avances. Primero se refirió a los pedidos presentados en agosto de 2016 por los vecinos de Río Negro. Del “total de 18 compromisos, los que se cumplieron o están en ejecución son 16; dos están pendientes”, aseguró.

El mandatario dijo que no hay que olvidar “que estamos en la primera mitad del período de gobierno”. Así, sin mencionarlo, se refirió a los dichos del senador del Partido Nacional (PN) Luis Lacalle Pou, quien ha insistido en varias oportunidades en que el gobierno actual parece que se “está despidiendo”. Ayer, el primer mandatario respondió: “Algunos dicen que el gobierno está terminado. Nos queda mucho por hacer. Y vamos a cumplir a rajatabla con lo que nos hemos comprometido”.

Vázquez enumeró todas las promesas que hizo en junio de 2014, tras ganar las elecciones internas, y mencionó, entre otras cosas, la puesta en marcha del Sistema Nacional de Cuidados, la gran cantidad de municipios que demuestran el avance en la descentralización y la entrega de tabletas a los jubilados, en el marco del Plan Ibirapitá. El presidente dijo además que se está buscando cumplir con la meta de que 100% de los ingresados al ciclo básico de secundaria culminen este período, que la totalidad de los jóvenes de 17 años se encuentren en el sistema educativo y que la tasa de egreso en la enseñanza media sea, como mínimo, de 75%. Como ejemplo del éxito de la enseñanza de informática mencionó a los estudiantes del liceo 116 de Tala, que ganaron el premio First LEGO League World Festival en Estados Unidos. El mandatario dijo además que está en marcha el Plan Nacional de Vivienda, para atender a 38.000 familias que viven en lugares en los que sus necesidades básicas están insatisfechas. Mencionó que ya se aprobó una ley para que el pago del Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas (IRPF) para aguinaldos y salarios vacacionales se haga de manera separada del resto de las retribuciones. Sobre la inflación, dijo que se había comprometido en mantenerla en el rango de entre 3% y 7%, y aunque admitió que esto se demoró un poco, sostuvo que se está cumpliendo, dado que se ubica actualmente en 5,24 %. En infraestructura, aseguró que casi la mitad de los 12.500 millones de dólares –destinados a “obras viales, ferroviarias, portuarias, aeroportuarias, energéticas y de telecomunicaciones”– están en “vías de ejecución”. También sostuvo que están mejorando las cifras de seguridad del país (el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, hizo un informe pormenorizado), y destacó la “importante cantidad” de personas privadas de libertad que estudian, trabajan o hacen tareas de obras sociales.

A continuación, calificó a Uruguay de “un oasis de paz, con tolerancia, democracia, libertad”, en comparación con los países vecinos. “Se nos ha reconocido como el país que tiene la mayor libertad de expresión, la mayor libertad de prensa. Vivimos en paz y en tolerancia”. Como un ejemplo de esa tolerancia mencionó la movilización del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (SUNCA) que ayer, en el marco de un paro nacional, se trasladó hasta Río Negro. “A pocas cuadras un sindicato, con todo el derecho que tiene, con la obligación que tienen sus dirigentes de defender los intereses de los trabajadores que agremia, con libertad y respeto, están reunidos y se pueden manifestar”, dijo. El SUNCA se manifiesta debido a una resolución del Banco de Previsión Social que modifica los criterios de liquidación del pago de licencias y salarios vacacionales de la construcción. El presidente del gremio, Óscar Andrade, sostuvo que los trabajadores de ese sector esperan más diálogo por parte del gobierno. “Es una decisión equivocada. Es una forma de negociar que no compartimos”, dijo a Radio Uruguay.

La mañana de Murro

Cuando llegó la hora de los reclamos, se destacó la intervención de dos mujeres. La primera en hablar relató que militó para el gobierno en una coordinadora y aseguró que cobra apenas 9.800 pesos de jubilación como empleada doméstica. En varias oportunidades le preguntó al presidente si esa jubilación le parecía justa. En cuanto terminó el discurso de la mujer, de inmediato el presidente le cedió la palabra al ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro. El ministro destacó los logros obtenidos por las empleadas domésticas gracias a la implementación de los Consejos de Salarios, aunque admitió que la situación que la mujer vivía es “injusta”. Según dijo, el gobierno tampoco podía hacer “magia”, y argumentó que, de no haber sido por los gobiernos del Frente Amplio, ella estaría ganando cerca de 3.000 pesos.

Pero una cifra similar a la que esbozó el ministro apareció en boca de otra señora, que le preguntó a Vázquez por qué se paga tanto a UTE y OSE. “Usted nos prometió que los más necesitados iban a pagar menos que los que más podían, y pagamos más o igual que ellos”, dijo, entre lágrimas. La vecina se refirió a la intervención anterior y dijo que la mujer tiene que saltar de alegría, “porque yo cobro 3.260 pesos, y cuando me vienen los recibos de 1.700 pesos de UTE y otro tanto de OSE, no sé si ir a la carnicería a buscar un pedazo de carne o pagarlos. ¿A usted le parece justo en un país de riquezas como ustedes lo llaman?”, preguntó la mujer. Luego relató que tiene dos hijos que hacen trabajos rurales y le sugirió a Vázquez que recorra el campo, porque “la gente trabaja con hambre”.

La respuesta del presidente fue: “Seguramente sus hijos tengan una ley de trabajo de ocho horas, como todos los trabajadores rurales que no la tenían antes y trabajaban de sol a sol. Seguramente sus hijos tengan derecho a cobrar salario vacacional, que antes no lo cobraban. Tienen derecho a cobrar un aguinaldo, que antes tampoco tenían. Hoy tienen derecho, en el Consejo de Salarios, a defender sus salarios. ¿O miento, señora?”. Vázquez pidió que compare lo que tenían antes con lo que tienen ahora. Luego siguió: “Mire, señora, yo la comprendo, estoy hablando del tema de los trabajadores rurales, pero modestamente, y [como] siempre empiezo diciendo en cada actuación pública, lo primero es lo primero, y [eso] es agradecer, mala cosa es ser desagradecidos. Los trabajadores rurales hoy están como nunca estuvieron en la historia de este país”, aseguró.

Luego Murro destacó que en 2016, de los 118 grupos de Consejo de Salarios el del sector rural “fue el único en el que el gobierno tuvo que hacer un decreto para establecer un aumento de salarios a los trabajadores, porque las gremiales, “en particular la Asociación Rural y la Federación Rural, se negaron a negociar”. A continuación le pidió una conversación en privado a la mujer para tratar el tema de su jubilación; el ministro dijo que no existen jubilaciones de tan bajo monto, salvo que tengan otra o se le estén aplicando descuentos. “Las jubilaciones de las mayores de 65 años siempre están en el entorno mínimo de los 10.000 pesos”, explicó el jerarca.

La debida responsabilidad

Minutos después, un trabajador del frigorífico Frigocerro denunció persecución, discriminación y falta de higiene. “El Ministerio de Trabajo [y Seguridad Social], hasta la fecha, con respecto a los trabajadores, no ha hecho nada”, disparó. Aseguró que algunos empleados están cobrando 2.500 pesos por quincena. “Hemos hecho de todo para denunciar; también hay absoluta falta de higiene en una empresa que exporta. El Ministerio de Ganadería [Agricultura y Pesca] no ha hecho absolutamente nada, y al de Trabajo tampoco lo hemos visto”.

Murro fue el primero en contestar, y dijo que en el frigorífico hubo 20 inspecciones y se aplicaron decenas de sanciones, “por tanto no es cierto que no se haya hecho nada [...] No puede ser que se digan estas cosas sin la debida responsabilidad, asumimos lo que estamos diciendo. Vamos a seguir conversando con ustedes [los trabajadores] y tomando las acciones que tengamos que tomar”.

Por su parte, el viceministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech, afirmó que no es la primera vez que reciben denuncias de ese frigorífico, pero explicó que “si está exportando es porque ha cumplido [con las condiciones de higiene]. Muchas veces recibimos denuncias que no se pueden constatar en la práctica”.