Alrededor de un centenar de personas procedentes de distintos puntos del país se reunieron el sábado en el salón comunal del Complejo Atahualpa para repasar los avances y retrocesos en su situación como deudores del Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) y definir los próximos pasos a dar. Gustavo Firpo, vocero del grupo, dijo a la diaria que quedaron muy conformes con el resultado de la convocatoria y que resolvieron seguir impulsando cuatro reclamos fundamentales: la protección a deudores en situación de vulnerabilidad, a los que el “gran incremento de la cuota pone en riesgo de perder todo, luego de pagar durante décadas”; la racionalización de los colgamentos, que inflaron las deudas; la aceptación de la recomendación hecha por la Institución Nacional de Derechos Humanos de restablecer la ecuación entre las partes, perdida por el gran crecimiento de la Unidad Reajustable; y terminar de trasladar las antiguas deudas “de carácter social, que quedaron en un banco [el BHU] que se transformó en puramente comercial”, a la Agencia Nacional de Vivienda.

Firpo agregó que toman “con profunda preocupación” el aumento anual, a pagarse en octubre, que es de “la inflación anual más 4,7%”. Los aumentos por encima de la inflación, dijo, “ocurren sistemáticamente” y llevaron, en los últimos 15 años, “las cuotas y saldos a las nubes”.

El grupo mantendrá la próxima semana “profusos contactos de trabajo” con partidos políticos, entre los que destaca la invitación de la bancada del Frente Amplio para conversar en busca de una solución. Además se concentrarán el 3 de octubre a las 11.30 frente al anexo del Parlamento.