La asociación civil Educación Solidaria, que gestiona más de una decena de convenios con el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), ha estado en el tapete en las últimas semanas. Todo surgió luego de que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza Privada (Sintep) y el Sindicato Único de Trabajadores de Instituciones Gremiales y Afines presionaron para cobrar en fecha los salarios y difundieron las carencias edilicias de los locales de atención a niños y adolescentes. El intercambio los llevó a la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), donde la organización les comunicó a las autoridades de Mides y del INAU que no continuaría con los convenios. Pero debe hacerse una transición.

Las cosas no vienen bien y, hasta ayer, los 130 trabajadores seguían sin cobrar el sueldo de agosto. Sintep envió el martes una carta a las autoridades a causa de ese incumplimiento, que calificó de “muy grave”. La misiva, firmada por el secretario general de Sintep, Sergio Sommaruga, solicita a las autoridades salvaguardar los derechos de los trabajadores y el inmediato pago de los salarios. Pide, además, cobrar una multa de 10% por los perjuicios que tienen al no recibir el pago en tiempo y forma, y reclama “conocer la solución que asegure la continuidad a la atención educativa y social para niños, niñas, adolescentes y familias”, así como la preservación de los puestos de trabajo. Mañana tendrán la tercera reunión en la Dinatra.

El 5 de setiembre los diputados nacionalistas Gloria Rodríguez y José Luis Satdjián hicieron un pedido de informe dirigido al Mides y, por su intermedio, al INAU, a raíz de “las irregularidades denunciadas por los trabajadores”. Pidieron conocer la cantidad de proyectos, convenios y acuerdos que tiene la asociación Educación Solidaria con el Mides, la cantidad de usuarios, la infraestructura, el material didáctico y recreativo, las condiciones de higiene; solicitaron información respecto de si había haberes impagos y, de ser así, cuáles son los montos. Requirieron detalles sobre la gestión de la asociación desde 2014 a la fecha, e información acerca de las inspecciones oficiales realizadas por el Mides. Por último, consultaron cómo se afrontarán las necesidades de los usuarios que reciben algún cuidado o servicio de la ONG si esta suspende sus actividades.

Matías Gallardo, secretario de Seguridad y Salud Laboral del Sintep, informó ayer a la diaria que hay Centros de Atención a la Infancia y la Familia (CAIF) y centros juveniles que no tienen partidas de alimentos y de limpieza: los proveedores se niegan a entregar mercadería porque Educación Solidaria les debe partidas anteriores. El problema es serio, y por ese motivo el CAIF Andares, de Nuevo Colón (Montevideo), no está recibiendo niños. Los trabajadores están cumpliendo el horario de trabajo, pero emitieron este comunicado: “Educación Solidaria e INAU siguen incumpliendo, no pagan los sueldos ni envían las partidas para la atención de niños y niñas. El equipo ha sorteado esta dificultad durante meses, pero la misma se ha agudizado, por lo que hemos decidido no atender niñ@s hasta que se regularice la situación, dado que actualmente no contamos ni con los recursos para recibirlos”. En otros CAIF “se está haciendo una guardia alimenticia con lo que les está quedando”, agregó Gallardo.

A todo esto, esas partidas ya habían sido enviadas por los organismos del Estado, pero no llegaron a los destinatarios. Los sindicatos ya pidieron a los organismos que averigüen qué ocurrió.