“El otro día no se cumplió con la Ley de Procedimiento Policial ni con el protocolo interno de traslado de personas privadas de libertad. Esto tuvo consecuencias; las están investigando los jueces del caso y nosotros resolvimos realizar una investigación interna”, señaló ayer el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, sobre la fuga, el domingo, de un recluso que había sido trasladado al Instituto Nacional de Ortopedia y Traumatología, gracias a la ayuda de individuos armados. El ministro señaló que el recluso ya se había fugado del Hospital de Clínicas en 2015, por lo tanto “se [lo] consideraba una persona peligrosa” y no correspondía trasladarlo solamente con dos policías. Además, subrayó que, si bien eso ya no es un tema policial, “se hizo un traslado de forma urgente por un problema en un dedo”, que no era “imprescindible hacerlo en ese momento”, por lo tanto se está investigando por qué se obró de esa manera.

La conferencia de prensa fue convocada luego de que Bonomi participara en una reunión, junto con Susana Muñiz, presidenta del Directorio de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Gustavo Grecco, presidente del Sindicato Médico del Uruguay, Néstor Campos, presidente del Colegio Médico del Uruguay, y Martín Pereira, presidente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública, quienes plantearon sus preocupaciones acerca de la seguridad de médicos y funcionarios ante los traslados de personas privadas de libertad, luego del hecho del domingo.

Después de la reunión, Muñiz dijo que “los temas de seguridad no son nuevos” y que están trabajando en ellos desde “hace mucho tiempo, todos juntos”. Agregó que se analizó la fuga del domingo y que estuvieron trabajando “en un plan que tiene que ver con que justamente sólo los pacientes críticos serían los que se trasladarían a los hospitales”. Además, dijo que se está construyendo un “centro de salud” en la cárcel de Punta de Rieles y que en la zona oeste se está trabajando en incrementar la “resolutividad” del centro de salud del Comcar. “Más allá de esto, también vamos a trabajar ahora en un plan de contingencia con los compañeros que sufrieron esta agresión el domingo, y que nos permita llegar al 1º de enero de 2018 en otras condiciones”, señaló la presidenta de ASSE, quien por último señaló que analizaron la posibilidad de evitar el traslado de personas privadas de libertad hacia centros hospitalarios, “utilizando herramientas tecnológicas, como telemedicina, que son importantes para evitar traslados innecesarios”, finalizó.