Las repercusiones del anuncio de Raúl Sendic de que va a renunciar a la vicepresidencia de la República, realizado el sábado en el Plenario Nacional del Frente Amplio, todavía se están haciendo sentir. Desde la Lista 711, el sector de Sendic, volvieron a criticar el fallo del Tribunal de Conducta Política. “Los gastos de Raúl fueron ínfimos, casi insignificantes. Si se le da una trascendencia tan grande es porque se lo quiere ensuciar. O sea, ¿qué son 20.000 y pico de pesos contra el agujero de cientos de millones de dólares que dejó en ANCAP?”, aseguró el diputado Felipe Carballo.

Las reacciones de la oposición fueron variadas. Mientras que los partidos Colorado e Independiente pintaron un paisaje bastante calmo de la situación, para el Partido Nacional se está ante una “crisis institucional”. El senador Luis Lacalle Pou afirmó ayer que, si bien “el hecho de que renuncie un vicepresidente y asuma en su lugar la senadora más votada del sector más votado de su partido no afecta la calidad de las instituciones, lo que pase a partir de ahora con las tarjetas corporativas de las empresas estatales es más preocupante”. Para el líder nacionalista “es claro que después de esto las tarjetas corporativas prácticamente van a desaparecer. Y si ya no hay tarjetas corporativas, ¿quién va a querer ocupar cargos? El país está al borde de un vacío de poder. O a lo mejor conseguimos gente que quiera ocupar un cargo, pero es impensable que acepten hacer un viaje al exterior, o alguna reunión fuera de hora en algún restaurante. Serían prácticamente oficinistas”. Para Lacalle Pou, la solución sería “tomar medidas paliativas” ante la “falta de estímulos para cargos de confianza”. “Se podría establecer una canasta básica del directivo de las empresas públicas, con ropa deportiva, celulares, gorritos que digan I Love New York y ese tipo de cosas, que se entregaría a fin de año. Estaría todo documentado, sería algo transparente, supervisado por el TOCAF [Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera] y a la vista de la opinión pública”.