“A partir de la globalización, las revoluciones pacíficas y, lamentablemente, también de las otras, se inician con chispazos. Es de los procesos democráticos más lindos de la humanidad. Antes había que juntarse, había una plataforma y alguien que lideraba; hoy, un sentimiento, una indignación, una protesta, un reclamo justo inician un movimiento”, dijo el sábado Luis Lacalle Pou, líder del sector Todos del Partido Nacional (PN), en el tradicional encuentro del sector en La Paloma (Rocha). El nacionalista aseguró que su partido tiene que tener la capacidad de incluir a las personas que no tienen “una conformación política”, a “ese ciudadano que hoy se siente sin representación”. Según fuentes del sector, el tema por el que había más expectativa antes del discurso era el reclamo de los productores rurales, y muchos de los dirigentes del interior esperaban que el líder de Todos se expresara al respecto.

“Si hay algo que no tiene [la movilización] es política partidaria, pero sí es política. Guambia la tosca que alguien se crea que el cambio no está en la política, porque marchó antes de empezar. Podemos estar poco, mediano o muy enojados con los dirigentes políticos, y los dirigentes tenemos que asumir que si recae el enojo sobre nuestros hombros es porque algo no estamos haciendo bien. Cada uno con su cuota de responsabilidad”, dijo Lacalle Pou. Afirmó que el reclamo de los productores “excede lo productivo”. “Hay un sector de iluminados que se cree que el país con asistencia social, el país sensible, es hijo del Frente Amplio [FA]. [...] En todos los gobiernos, en mayor o en menor medida, hubo una fuerte presencia social, desde la escuela pública hasta la salud pública. Los distintos partidos, con los que podemos tener diferencias, estamos de acuerdo en que el ciclo del Frente Amplio se terminó”, sostuvo.

Beatriz Argimón, secretaria del Honorable Directorio del PN, consideró que uno de los mensajes más importantes fue el que marcó la estrategia del partido. “Los puentes son para tender y cruzarlos nosotros”, dijo Lacalle Pou. Para Argimón fue “el gran mensaje”. “No siempre somos nosotros los que tenemos que convencer: también tenemos que escuchar y alguien nos puede convencer a nosotros. Fue un mensaje muy fuerte para la dirigencia del sector, para ver cómo nos plantamos. Yo sentí que era un mensaje modernizador”, dijo a la diaria.

El diputado nacionalista Javier García coincidió en la importancia de la pluralidad y “la capacidad de escuchar a la gente de otros partidos y respaldar sus propuestas”.

Afirmó que en el caso de que el PN gane las próximas elecciones, no va a gobernar solo, “por la sencilla razón de que no va a tener mayorías legislativas propias, y si las tuviéramos, tampoco sería obstáculo para convocar a otros”. “Hemos planteado que el gobierno del FA fue de partido único, con una mayoría que no escuchó. Nosotros nos quejamos, y el sábado Luis [Lacalle Pou] delineó lo que va a ser la conformación plural de un futuro gobierno”. Para García, el partido de la Concertación de Montevideo es un ejemplo de esa apertura. A pesar de que el sábado no se habló de reeditar la Concertación, García afirmó que fue “absolutamente necesaria para ganar y para gobernar”; sin embargo, dijo a la diaria que no se podría implementar en otros departamentos, porque “hay diferencias notorias” con la capital. Para García, el éxito de la Concertación fue objetivo, porque “el PN, que no ganaba en Montevideo desde 1958, con la Concertación pasó a gobernar dos municipios en Montevideo; eso es objetivo”. Afirmó que el líder de Todos fue “muy claro y pasó una línea” cuando habló del final del ciclo político del FA. Lacalle Pou dijo que el gobierno fracasó. “El modelo en el que el laburante, el trabajador, el emprendedor, el industrial, el comerciante le transfieren sus recursos, fruto de su esfuerzo, en vagones [al Estado]; el Estado empresario que tengamos, que despilfarra, ya no corre más en el país”. “La plata tiene que estar en la gente, que es la que genera riqueza. No me vengan con discursos de división; ya está, lamentablemente ya les sirvió, hicieron uso de la división como un instrumento”, sostuvo, en referencia al FA.

Lacalle Pou también habló sobre la seguridad: “La ciudadanía pide que la gente que hace las cosas bien pueda vivir tranquila. Hemos propuesto un número de medidas, y tenemos más, pero hoy, sin perjuicio de que hay temas jurídicos para modificar la seguridad pública, también hay temas más anímicos, que es querer cambiar, querer defender a la gente de bien. Estoy cansado y me niego a que en Uruguay haya barrios en los que la Policía y el Estado no están porque son zonas rojas, por lo que hay que dejarlos liberados. Cada vez que pasa algo, le ponemos un titular, […] un ajuste de cuentas, o bandas que se enfrentan. La primera forma de no hacerse responsable es alejarse de la situación y decir que es culpa de otra cosa. Cuanto más difícil, dura y violenta [es la realidad], más Estado, más presencia y más atención tenemos que tener”, dijo el líder de Todos. Por su parte, Argimón resaltó que la seguridad es una de las preocupaciones de la población. “Al prender el televisor todos los días hay un joven muerto; serán ajustes de cuentas, pero son muchachos que se mueren todos los días. La gente está muy sensible con este tema”, afirmó.