Este año no habrá reinas en el carnaval capitalino: la Intendencia de Montevideo (IM) decidió que el concurso será de Figuras de Carnaval, Llamadas y Samba, porque, por primera vez, participarán hombres. El cambió no gustó a DAECPU (Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay). Enrique Cachete Espert, presidente de DAECPU, dijo a la diaria que en la institución no están de acuerdo con las modificaciones, y le auguró poca vida al certamen. “Nos gustaba que el concurso fuera de carnaval, como lo fue toda la vida. En Canelones lo hicieron así y al otro año ya no hubo concurso; vamos a esperar lo que dice el tiempo”, dijo. Espert sostuvo que los cambios que introdujo la IM en 2017 y 2018 provocaron que bajara el número de concursantes. “Cuando era de misses se presentaban 180, 200 candidatas, y en este último se presentaron 40 y pico de personas”. El presidente de DAECPU reiteró que, a su entender, lo mejor sería separar a los concursantes en distintas categorías. “Se puede hacer un concurso de señoras mayores o de gays, pero individual, porque el mismo [jurado] que está puntuando, cuando determina quién tiene que ser el ganador está discriminando a los demás, porque todos son diferentes. Es complicado, es para discutir, pero yo no quiero, quiero tener un buen carnaval”. En 2016, cuando la IM sacó el límite de edad de 25 años y extendió la convocatoria a personas con discapacidad y chicas trans, se generó una gran polémica por los dichos de Espert. En aquella oportunidad declaró a la radio 1410 AM: “Si quieren poner una reina trans, que hagan un concurso trans; si quieren poner a un puto, que hagan uno de putos; y que no se olviden y hagan de bufarrones, porque si no hay bufarrones no hay maricas”. Ayer dijo a la diaria que la comuna no consultó a DAECPU, pero aseguró que mantienen buenas relaciones, aunque “ellos se ponen en su posición y se quedan ahí”.

Según informó la IM, la elección de las Figuras será el lunes 22 de enero a las 20.30 en el Museo del Carnaval (rambla 25 de Agosto esquina Maciel); la entrada es gratuita pero con invitación. La convocatoria dice: “Este año la elección busca reconocer a quienes representen con mayor fidelidad el espíritu solidario, alegre e inclusivo de la fiesta más popular del país. Serán 20 las y los aspirantes participantes”.

Patricia González, prosecretaria interina de la IM y directora de la Secretaría para la Igualdad de Género, confirmó a la diaria que cada vez se anota menos gente al concurso, pero aseguró que es una tendencia que viene de años. González informó que este año siete centros comunales zonales decidieron no presentar candidatos y hacer otro tipo de actividades. “Hace dos años que venimos trabajando con las comisiones de vecinos sobre cómo manejar la participación. Cada vez se presentaban menos personas y les dimos la opción a los vecinos de hacer otras cosas. La IM financia las actividades, que van en la línea de propiciar que el barrio participe”, dijo la jerarca. En pocas palabras

Con Patricia González, prosecretaria interina de la IM

–¿Por qué se decidió que este año se pasara del Concurso de Reinas a Figuras del Carnaval?

–Hace dos años se definió un cambio: si no es un concurso de belleza, ¿por qué sólo se podían presentar mujeres menores de 25 años? Este año dimos un paso más y nos preguntamos por qué no se podían presentar hombres, si lo que buscamos son embajadores del carnaval en los barrios; por eso, entre los 20 preseleccionados, hay tres hombres que concursarán.

–¿Cuál será el criterio del jurado para elegir a los ganadores?

–Se califica a todas las personas independientemente de su género y su edad. Se mide el conocimiento del carnaval, la alegría carnavalera, la onda para presentarse en el escenario, su vínculo con la fiesta y la relación con los procesos sociales en el barrio, si son referentes. A diferencia de otros años, en los que se hacía una fría puntuación, este año el jurado está haciendo entrevistas en las que se indaga en cada uno de los puntos.

–¿Se manejó la posibilidad de que el cambio genere rechazo?

–Sí, hicimos un proceso participativo que lleva dos años. No decretamos que a partir de hoy no hay más reinas; si nosotros creyéramos que tenemos que poner nuestra posición por encima de la del resto, habríamos hecho otra cosa: eliminar el concurso. Eso nunca estuvo sobre la mesa. Lo que estamos elaborando es un espacio que tenga perspectiva de género. El cambio se votó en la última reunión de los concejos vecinales; la definición da cuenta del proceso en el que estamos. El objetivo es abrir la cancha.