Los cambios en los contratos de Antel han dado que hablar durante los primeros días del verano, y los promotores de los proyectos de portabilidad numérica han aprovechado la ocasión para reimpulsar sus iniciativas. Se entiende por portabilidad numérica la posibilidad que tiene un usuario de telefonía celular de mantener su número aunque cambie de empresa, algo que no es posible actualmente en Uruguay.

Uno de quienes reclamaron que exista este beneficio para los usuarios fue el senador colorado José Amorín Batlle. “El problema es cuando no hay competencia, o la competencia está imposibilitada por la imposibilidad de llevarte el número. Que no haya portabilidad numérica es una barrera en contra de la competencia.

Existe en casi todo el mundo, pero acá no”, dijo el legislador, en diálogo con la diaria.

Amorín presentó un proyecto de ley en mayo del año pasado que actualmente se encuentra en la Comisión de Energía, Comercio, Turismo y Servicios de la Cámara de Senadores.

Esta semana, el senador Pablo Mieres se sumó al reclamo de la portabilidad numérica, anunciando en Twitter que apoya la iniciativa del legislador colorado: “Nosotros estamos totalmente de acuerdo con la portabilidad numérica desde hace mucho tiempo y apoyamos el proyecto presentado por Amorín”, escribió.

Pero no sólo el senador y ex ministro colorado está peleando por que la portabilidad numérica llegue a Uruguay. También lo está haciendo el ex diputado Martín Elgue (lista 404, Partido Nacional), quien decidió embanderarse con la propuesta, al punto de iniciar una campaña digital en un sitio que se llama www.elpueblodecide.com.uy, que aspira a conseguir “cientos de miles de firmas” para la aprobación de la norma. Al cierre de esta edición, 300 personas habían firmado.

Elgue había presentado un proyecto sobre portabilidad numérica durante la legislatura pasada, que fue reflotado en esta por un diputado de su sector, Amín Niffouri. “Si tuviésemos portabilidad numérica y cada usuario fuera dueño de su número, cada uno tendría más libertad para cambiarse. Somos de los pocos países de América Latina que no la tenemos”, expresó.

La idea de Elgue es recolectar las firmas para que sean presentadas al Parlamento al inicio del próximo año legislativo, el 1 o de marzo. Elgue dijo que a diferencia del proyecto de Amorín, su iniciativa tiene otros dos pilares: la portabilidad de los teléfonos fijos y que las compañías telefónicas no puedan bloquear los teléfonos para que puedan ser operados por una sola empresa.

No obstante, dijo que lo importante es “que se apruebe la portabilidad numérica, y no quién firma el proyecto”, algo que a su juicio es “secundario”. “Si hay que sacarle lo de los bloqueos de los teléfonos o la portabilidad de los teléfonos fijos, no tengo problema”, expresó.

En tanto, el diputado Julio Battistoni (Frente Amplio) dijo que el tema ya fue debatido en la Comisión de Industria, Energía y Minería de la cámara baja, y allí esta idea “fue debatida y cuestionada por los técnicos de Antel”, sin que ninguno de los diputados de la oposición pudiera objetar algo. “Podría afectar la calidad de la transmisión misma, porque un número podría conectarse a una antena que podría no ser la de la empresa que se corresponda con ese número.

Y eso implicaría que cada antena tuviera que confirmar de dónde estás llamando para cargar esa cuenta a la empresa correspondiente”, argumentó.