El Partido de los Trabajadores (PT), sin representación parlamentaria, promueve la recolección de firmas para derogar la Ley de Riego, aprobada en octubre del 2017. Nicolás Marrero, dirigente del PT, aseguró a la diaria que la modificación de la Ley 16.858 privatiza el agua y viola el artículo 47 de la Constitución, aprobado en la reforma de 2004, que dice que “el agua es un recurso natural esencial para la vida” y que “el acceso al agua potable y el acceso al saneamiento constituyen derechos humanos fundamentales”.

Para que la ley sea puesta a consideración de la ciudadanía se debe recolectar 700.000 firmas antes de octubre de este año. “Llamamos a las organizaciones sociales y al PIT- CNT a que se sumen a esta campaña; si todos los partidos votaron una ley que privatiza el agua, los trabajadores necesitan una alternativa propia”, sostuvo Marrero. El integrante del PT considera que la ley es “un avance en la privatización de agua, porque crea un mercado de agua y permite un negocio; además, hay estudios de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República y de distintas organizaciones ambientales que dicen que tendrá consecuencias para el abastecimiento de agua potable a la población; por lo tanto, la privatización y la contaminación van de la mano”.

A mediados de octubre de 2017, cuando el proyecto era discutido en el Parlamento, académicos de la Facultad de Ciencias y organizaciones como Redes-Amigos de la Tierra y la Comisión en Defensa del Agua y de la Vida advirtieron que la iniciativa viola la Constitución porque habilita la mercantilización del agua. La ley prevé la posibilidad de que inversores privados, no vinculados al sector agrícola, se incorporen a las Sociedades Agrarias de Riego; las empresas, además, se pueden acoger a los beneficios fiscales establecidos en la Ley de Promoción de Inversiones.

Para el dirigente del PT, la ley no sólo beneficia al sector arrocero, sino también a los productores de soja y maíz, además de favorecer “a actores externos al agro, como fondos financieros y capitales especulativos que pueden intervenir en este negocio”.

“Nos llama la atención que los productores que hoy están manifestando son los grandes beneficiarios de esta ley”, dijo, y aseguró que se trata de un punto más en “un plan general de privatizaciones del gobierno”, que ya se puede ver en sectores como el de la “energía eólica y la banca”. Sobre el conflicto de los productores rurales, Marrero sostuvo que “las movilizaciones son reaccionarias” porque la plataforma defiende el interés de los patrones: la devaluación, la quita de impuestos a los productores y el recorte de las políticas sociales del Estado.

Aseguró que uno de los motivos de la salida de Tabaré Aguerre del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) fue precisamente la exigencia de las gremiales patronales de que hubiera “un giro en la política”. “El gobierno tiene un gran problema a resolver, porque una de las demandas es que el dólar se vaya a 36 pesos, y el gobierno no tiene el control del tipo de cambio, por lo que es difícil que un cambio de ministro pueda resolver las reivindicaciones que hoy hacen las gremiales”. Marrero sostuvo que los productores tienen que reducir costos y que “en estos días saldrá un achique salarial”. Con relación al ex ministro Aguerre dijo que promovió la modificación de la Ley de Riego porque lo beneficia directamente, ya que es productor arrocero; “de todas maneras, hay una presión evidente de la Federación Rural para lograr un viraje en la política económica”, concluyó.

Reformas laborales

Para Nicolás Marrero, la desregulación laboral que llevó adelante el gobierno de Michel Temer en Brasil se corresponde con lo que sucede en el resto del mundo, y recordó, como ejemplo, el caso de Francia. “Junto con la reforma laboral viene la reforma previsional. La particularidad de Uruguay es que ya tiene un sistema bastante flexible en sus relaciones laborales que permite cosas como la extensión de la jornada laboral, la posibilidad de desenganche de los convenios colectivos y una serie de elementos que hoy, sin una reforma laboral, se podrían llevar adelante igual”.

La derecha aprovecha

Nicolás Marrero dijo que la oposición en Uruguay “está intentando canalizar la movilización de los productores rurales; la derecha se prepara y quiere asumir ese liderazgo”. “La peculiaridad que tenemos es que todavía el Frente Amplio sigue representando los intereses de los grandes capitales, lo ha demostrado con los recientes tarifazos y con el ajuste fiscal en marcha. La derecha tiene que demostrar que puede representar mejor esos intereses”.

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