Decenas de columnistas uruguayos se dedicaron la semana pasada a analizar el triunfo del candidato ultraderechista Jair Bolsonaro en la primera vuelta de las elecciones brasileñas. Un investigador en temas de comunicación de la Udelar aseguró que el resultado electoral “reveló dos datos alarmantes sobre Uruguay. En primer lugar, que hay una enorme cantidad de fascistas. En segundo lugar, que hay una cantidad no menos grande de personas que no saben utilizar las comillas. En varios textos, estas personas al hablar de Bolsonaro entrecomillaban términos como machista, homófobo o racista; evidentemente desconocen que en algunos casos entrecomillar una definición sirve para relativizar su validez, no para reafirmarla”. La mayoría de los analistas que apoyan a Bolsonaro comparten con los principales líderes de la oposición la teoría de que el triunfo del candidato es consecuencia directa de las políticas del Partido de los Trabajadores (PT), algo que les trajo algunos inconvenientes. Un médico que trabaja en una emergencia médica explicó que durante el fin de semana “se registraron varios casos de columnistas de medios conservadores y dirigentes de la oposición que colapsaron al razonar que si el PT al que tanto odian tiene la culpa de que Bolsonaro esté muy cerca de la presidencia, y a Bolsonaro lo aman, entonces el PT hizo cosas buenas. Llegar a esta conclusión les provocó sudoración, palpitaciones y picos de ansiedad”.