En la mañana de hoy se retomará la negociación en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) por el conflicto en el liceo Andrés Pastorino, que surgió a raíz del despido, a fines de diciembre, de la secretaria administrativa de la institución, una funcionaria que trabajaba desde hacía 30 años en el liceo y a la que le restan dos años de trabajo para poder jubilarse. Desde el 5 de febrero el núcleo sindical del liceo adoptó como medida no presentarse a tomar los exámenes del período de febrero, y el viernes 9 los docentes y dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza Privada (Sintep) explicaron los motivos del conflicto a padres y estudiantes del liceo.
Después de resolver la medida sindical, el Sintep se comunicó con la Dirección Nacional del Trabajo (Dinatra) del MTSS para retomar la negociación colectiva con el centro educativo, lo que se concretará hoy. “Cuando el colegio la despide, en principio, argumentan que es por la reestructura económica, y después dicen que fue por pérdida de confianza. Al principio fueron esquivos y cuando el MTSS preguntó a qué se referían hablaron de deslealtad, porque la funcionaria cobraba una hora extra cuando supuestamente habían acordado que hacía una hora de más pero sin cobrar”, explicó Sergio Sommaruga, secretario general del Sintep. El cambio de horario se produjo cuando la funcionaria pasó de trabajar de lunes a sábado a hacerlo de lunes a viernes, y según manifestó la empresa habían acordado que hiciera 45 horas semanales, cuando el tope horario semanal en el sector es de 44 horas. “Ellos dicen que el acuerdo era que esa hora extra no se pagaba, pero ese acuerdo no está firmado, y aunque estuviera firmado no tiene valor jurídico, es nulo”, añadió Sommaruga.
El sindicato reclama el reintegro de la trabajadora. El núcleo sindical se comprometió a que si eso se concreta se reagendará el calendario de exámenes, incluso tomando las pruebas sábado o domingo, si es necesario. Si la situación sigue sin resolverse, el sindicato podría solucionarse convocar a un paro general el primer día de clases.