La tercera edición del campeonato organizado por la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) fue la mejor expositora de que el fútbol playa en nuestro país crece en calidad. Este año se anotaron 12 equipos dispuestos en tres series. En partido todos contra todos llegaron los dos mejores a la ronda final, jugada en el mismo régimen pero con Apertura y Clausura. Los equipos que no llegaron a esta instancia disputaron el Torneo Competencia a una rueda, que fue ganado por Boston River.

El torneo Apertura fue ganado por Bella Vista, que sumó tres partidos con victoria en tiempo reglamentario, uno por penales y una derrota. De esa forma el equipo papal, que había sido primero con puntaje perfecto en su grupo, se aseguró un lugar en la final. El torneo Clausura tuvo a Racing como el mejor, con tres triunfos; dos de ellos en alargue, por lo que el torneo se dirimió con final a partido único. Lo curioso para esta edición fue que Malvín, vigente bicampeón, quedó fuera de la definición. Esta edición fue muy competitiva y pareja y se exigió a los equipos estar afiliados en AUF, o sea que representen a instituciones que juegan torneos oficiales. A su vez se exigió a cada jugador una ficha, carné de deportista, con habilitación de aptitud física.

La gran final, que convocó a muchos hinchas, fue un partido muy bien disputado con un gran ritmo y acciones de juego. El primer chico fue con victoria papal por 3-2, el segundo también con un marcador de 4-3. Para el final vino lo mejor y el cervecero logró igualar el partido 5-5. El tiempo suplementario siguió igual por lo que todo se definió en la tanda de penales, ganada por los del Prado 3-1. Bella Vista fue un justo campeón por el gran plantel que mantuvo, por la rotación, y clasificó a la Copa Libertadores de este año, que aún resta saber cuándo y dónde se disputará.

Francisco Rodríguez, entrenador de los papales, dijo a la diaria que “este año fue el torneo más parejo de todos los que disputó. Todos los equipos tuvieron una preparación planificada y se reforzaron con jugadores extranjeros, lo que aumentó el nivel en la competencia. De hecho todos los equipos pudieron ganarle a todos los rivales y no hubo uno con supremacía absoluta. El modelo del torneo está muy bueno porque beneficia al equipo más parejo en el certamen. El apoyo de la AUF y de la Secretaría [Nacional del Deporte] fue fundamental y la organización estuvo acorde”.

Consultado por la diaria, Kevork Kouyoumdjian, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol Playa, coincide en que este fue el mejor torneo de los que se han organizado desde 2006. “Se mejoró en calidad de deportistas e infraestructura. Tuvimos un tablero electrónico que es fundamental, vestuarios, jueces y pudimos aumentar los días de competición”, dijo al respecto.

Que no pare

Uno de los aspectos a mejorar quizá sea la prolongación del torneo. Kouyoumdjian entiende que esto es viable y es el objetivo principal. En 2016 se disputaron 32 partidos, en 2017 hubo 44 y en esta edición se pasó a 64 partidos con la final. Para el dirigente, “hay costos que deben asumir los equipos, pero la AUF subvenciona una gran parte del evento. Las instituciones le hacen frente a un costo del espectáculo que es realmente elevado, hay viáticos arbitrales, seguridad privada y pública, locutores, audios, alcanza pelota, etc”.

La presencia del Estadio Arenas del Plata, instalada entre diciembre y marzo, es el lugar ideal para realizar torneos locales e internacionales por tener las condiciones necesarias. “Lamentablemente el estadio está instalado por un período de tres meses y nosotros, para seguir desarrollando el deporte y ser competitivos a nivel mundial, debemos competir al menos ocho meses en el año”, comentó el presidente. Francisco Rodríguez también coincide en este punto y augura que lo ideal sería tener un predio propio para que todos los equipos puedan entrenar durante todo el año. “Dependemos de la Secretaría que nos da un tiempo que quizá es corto. En un año jugás un mes y es poco. Entendemos que la lógica es esta, pero lo ideal sería la construcción de una cancha fuera de la playa para que todos los clubes, incluso otros deportes, puedan entrenar y que la Asociación tenga su espacio. Es el paso a dar para levantar más el nivel y pelear a nivel internacional”.

La Asociación de Fútbol Playa está trabajando con el Ejecutivo y el departamento de desarrollo en la busca de un precio para la construcción definitiva de un mini estadio. Algo necesario para utilizarlo todo el año y seguir mejorando internacionalmente.