El presidente del Banco Central del Uruguay (BCU), Mario Bergara, se refirió ayer en rueda de prensa al reclamo de los productores rurales sobre el precio del dólar y el llamado “atraso cambiario”. El jerarca dijo que si bien los exportadores reclaman un dólar lo más alto posible, también hay que tener en cuenta a los productores que venden en el mercado interno en pesos y deben comprar los insumos en dólares, y a los productores que están endeudados en la moneda estadounidense. “No tendría sentido escuchar que productores endeudados en dólares pidan que el dólar suba mucho”, expresó. Bergara aclaró que si el BCU “no estuviera interviniendo”, “no queremos saber” a “qué niveles se hubiera desplomado la divisa norteamericana”. “El mercado de cambios en Uruguay es un mercadito, con transacciones diarias de montos relativamente pequeños. Para que tengan una idea, la compra del BCU en el mercado uruguayo ha estado en órdenes del 70% a 75% de los dólares que se transan en el mercado. Algunos días es el único comprador de dólares. Si el banco no hubiera intervenido, no tenemos duda de que la divisa se hubiera desplomado. Ponerle números sería caricaturesco, pero lo que está claro es que en este mercado pequeño el dólar estaría a niveles ridículamente bajos, y es algo que tenemos que combatir para mantener un dólar razonable”, explicó el presidente del BCU.
Bergara también enfatizó que tienen preocupación por el “atraso cambiario”, y para demostrarlo informó que el BCU compró en el último año la suma de 4.000 millones de dólares. “Si no nos preocupara el atraso cambiario, no tendríamos ese nivel de intervención en el mercado”, repitió.
Finalmente, Bergara también anunció que el BCU está trabajando en el entintado de billetes para desestimular el robo de cajeros automáticos, un mecanismo que ha resultado exitoso en varios países del mundo. “Se está comenzando la implementación, estudiando el cambio normativo que se requiere, que no es mucho. Es un mecanismo que, en circunstancias en que se pretenda violentar la estructura en la que está el cajero con el dinero, salta una tinta sobre los billetes que los mancha de manera suficiente como para marcar”, explicó. El presidente del BCU dijo que hay que “capacitar y educar a la gente [en] que los billetes entintados no valen”. “La gente tiene que tener claro que los billetes entintados no van a ser aceptados por el sistema bancario. Esto tiene un componente preventivo, de amenaza, en el sentido de que todo el esfuerzo que vas a hacer para tratar de robar ese dinero va a ser inútil, porque los billetes se van a entintar y no te van a servir”, concluyó.