En la espera

Ayer a las 18.00, en más de 230 puntos del país, productores rurales, transportistas y otros integrantes del movimiento Un Solo Uruguay comenzaron vigilias que durarán 24 horas o, al menos, hasta el mediodía de hoy, como símbolo de que esperan medidas del gobierno en respuesta a la plataforma que presentaron el martes 23 de enero, en la movilización que realizaron en Durazno. El sábado analizarán en una asamblea de delegados nuevas medidas a tomar y “cómo seguir”, aunque descuentan que participarán en la mesa de trabajo convocada por el presidente Tabaré Vázquez.

En general, los lugares elegidos fueron al costado de las rutas o en predios abiertos, aunque también hubo concentración en zonas urbanas; en Montevideo fueron en la rambla y Avenida Brasil, y en el Molino de Pérez. En muchos puntos los productores comenzaron a acercarse sobre el mediodía, pero a partir de las 18.00 aumentó la convocatoria; cerca de las 20.00, en todos los puntos se cantó el Himno Nacional. En cada lugar las actividades fueron diversas, según la “idiosincrasia local”, comentó Marcelo Nougué, uno de los voceros del movimiento. En algunos casos los manifestantes leyeron la proclama de la concentración del 23 de enero, mientras que en otros hubo oratoria a cargo de algunos de los productores, o charlas (por ejemplo, la que dio en Tacuarembó el ingeniero agrónomo Eduardo Blasina, uno de los oradores del 23 de enero), en otras sólo se conversaba informalmente, fogón mediante, sobre los reclamos y sobre las medidas anunciadas el lunes por Vázquez. En todas las concentraciones abundaban las banderas de Uruguay y había carteles con leyendas que hacían alusión a la situación: “Basta”, “Achiquen el costo del Estado”, “Secuestraron nuestro futuro, estamos aquí para rescatarlo”, “Medidas insuficientes. Unifiquemos criterios” eran algunas de ellas.

Según Nougué, entre el martes y el miércoles “se sumaron muchos puntos de vigilia”, lo que a su entender es una “muestra clara de que los planteos de Vázquez están lejos de atacar los puntos planteados en la plataforma, y lejos de la realidad que se está viviendo en el interior”. El lunes, después de una reunión con las gremiales del sector agropecuario, Vázquez anunció una serie de medidas. En primer lugar, una rebaja del gasoil de 18,3% para los productores arroceros, lecheros y hortifrutícolas que tributan Imeba (Impuesto a la Enajenación de Bienes Agropecuarios); de este descuento quedaron excluidos los grandes productores, que pagan Impuesto a la Renta de las Actividades Empresariales. La rebaja se implementará por medio de la devolución del IVA y tendrá una vigencia de un año a partir de marzo de 2018. En el caso del sector arrocero, la rebaja beneficiará a los pequeños y medianos productores, porque los grandes productores de arroz ya tenían una rebaja en el combustible.

Para el sector lácteo, Vázquez recordó la constitución de un fondo de garantía de 36 millones de dólares, que está a estudio del Parlamento y que se estima que podrá ser utilizado por 2.800 productores; anunció la extensión de la rebaja de 15% en la tarifa eléctrica a los productores lecheros hasta marzo, lo que beneficiaría a 3.600 productores, y la congelación de la renta para los productores familiares lecheros arrendatarios de tierras del Instituto Nacional de Colonización, lo que beneficiaría a 1.050 productores.

Para el sector arrocero se resolvió la extensión de la rebaja de 15% de la tarifa eléctrica para el sector arrocero industrial, porque la rebaja ya regía para 350 productores arroceros. La medida se aplicará con la condición de que ese descuento sea trasladado a los costos de los productores.

Los anuncios fueron considerados insuficientes por la Asociación Rural del Uruguay, la Federación Rural, las Cooperativas Agrarias Federadas y la Asociación de Cultivadores de Arroz, que consideraron que las medidas tomadas por el gobierno “no están a la altura” de la situación que vive el sector. También son insuficientes para los productores y empresarios nucleados en el movimiento Un Solo Uruguay, que esperaban planteos que tendieran a la baja del gasto estatal. Nougué reconoció que en tan corto plazo “uno no esperaba grandes medidas, pero sí que se reconociera que hay gastos superfluos en el Estado y que es posible recortarlos, pero no hubo ni siquiera eso”.

Nougué indicó también que en las vigilias se discutiría “cómo seguir”, algo que estará sobre la mesa el sábado en la reunión de delegados del movimiento que se llevará a cabo en Durazno, donde se hará una evaluación de lo que se ha hecho hasta ahora y se discutirá “la planificación, con qué estrategia seguir” como movimiento. Se plantearán como propuestas adoptar nuevas medidas de protesta y se discutirá si los delegados del movimiento deben participar en la mesa de trabajo convocada por Vázquez para los días siguientes a la Semana de Carnaval. Nougué aseguró que entre los coordinadores del movimiento “hay acuerdo en que hay que participar, porque no podemos desperdiciar ninguna instancia de diálogo”. Este fin de semana, Vázquez se reunirá con sus ministros en la estancia presidencial de Anchorena, en Colonia.

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