Este lunes llegó al Parlamento el proyecto de ley de rebaja de la contribución inmobiliaria rural, anunciado por el gobierno la semana pasada y que forma parte del segundo paquete de medidas del Poder Ejecutivo para solucionar los problemas del sector agropecuario. Lo estudiará la Comisión de Hacienda de la Cámara de Senadores. El presidente de la comisión, el nacionalista Álvaro Delgado, dijo a la diaria que citarán a representantes del Poder Ejecutivo y del Congreso de Intendentes para que den su visión sobre la rebaja, y no quiso adelantar una opinión personal sobre la iniciativa.

En primer lugar, el proyecto reduce transitoriamente la alícuota establecida por el artículo 652 de la ley presupuestal de 1986 para los propietarios de padrones rurales que exploten padrones menores a 1.000 hectáreas índice Coneat 100. Esta medida implica una rebaja de 18% de la contribución inmobiliaria rural para 84% de los padrones que pagan ese tributo –42% de las explotaciones agropecuarias no paga contribución porque son extensiones menores a 50 hectáreas–.

En segundo lugar, se establece una reducción adicional del monto del impuesto a pagar de 10% en los ejercicios 2018 y 2019 para los mismos beneficiarios, siempre que no sean contribuyentes del Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE).

Tres días después del anuncio del presidente Tabaré Vázquez, los intendentes del Partido Nacional rechazaron la iniciativa y reclamaron una “compensación”. Según informó en su momento Radio Uruguay, el intendente nacionalista de Colonia, Carlos Moreira, criticó que el Poder Ejecutivo haya anunciado la medida sin consultarlos. “Perder 30 o 40 millones de pesos le pega a cualquier economía”, argumentó, y aseguró que pedirán una compensación. Además, el Congreso de Intendentes resolvió pedirle una reunión a la Oficina de Planeamiento y Presupuesto para conocer de primera mano la medida del gobierno nacional.

De todos modos, el senador nacionalista Luis Alberto Heber dijo a la diaria que su partido apoyará el proyecto en el Parlamento, porque supone “empezar a hacer un esfuerzo para aliviar la carga impositiva que hay sobre el campo”. No obstante, cuestionó que el Poder Ejecutivo no realice “ningún esfuerzo”. “Los que están haciendo esfuerzos son los intendentes. Hacer el esfuerzo con la plata de otros al Poder Ejecutivo le resulta muy fácil”, criticó. El senador nacionalista consideró que el gobierno nacional debería complementar estas medidas con acciones de “ajuste del gasto público”. “Que ellos se ajusten un poco y que también haya otro tipo de rebajas para dar la señal de que la actividad productiva está reclamando. Estamos expectantes a que sea la primera, no la única medida de alivio impositivo”, señaló el legislador, y acotó: “Creemos que no da más el sector productivo”.