En febrero, los trabajadores de la panadería Fiesta de Oro, en la avenida 8 de Octubre, se sindicalizaron y se integraron a la Mesa del Pan, que nuclea a los sindicatos de las panificadoras. Según contó a la diaria Juan Carlos Fernández, delegado de rama de las panificadoras, los trabajadores se asesoraron porque les debían aumentos semestrales y salarios vacacionales, entre otros créditos laborales. Se hizo el reclamo ante la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) y en menos de un mes se solucionaron “unos cuantos temas”, aseguró Fernández.
Sin embargo, según aseguran los trabajadores, la empresa les pidió a los 40 empleados sindicalizados que disolvieran el sindicato porque de lo contrario iban a cerrar. “Entonces elevamos la denuncia sosteniendo que eso era cortarles la libertad de expresión a los trabajadores, y todo lo que eso conlleva. Se hizo un impasse de 15 días sin tomar medidas ni nada, y la empresa aprovechó y cerró intempestivamente. No le avisaron a nadie; cambiaron la cerradura y mandaron un mensaje de texto a los trabajadores”, contó Fernández. La empresa había despedido a principios de marzo a 17 trabajadores y recientemente a otros 38.
Con apoyo de la Mesa del Pan, los trabajadores presentaron una denuncia por persecución sindical ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), que incluye audios y papeles firmados que, según sostienen, prueban que la empresa amenazó con cerrar si no se disolvía el sindicato, señaló Fernández. El sindicalista agregó que luego la empresa cambió el discurso y alegó ante el ministerio que cerraba porque la panadería “no les estaba dando el rédito que querían”.
El lunes y el miércoles representantes de la empresa, de los trabajadores, del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT y del MTSS se reunieron en la Dinatra. Todas las partes volverán a mantener un encuentro el viernes 6 por el pago de los despidos. La empresa planteó pagarlos en 25 cuotas, pero finalmente se acordó que lo haga en un máximo de diez.