El comandante en jefe del Ejército, Guido Manini Ríos, recibió una sanción de 30 días de arresto a rigor, debido a sus críticas al proyecto del Poder Ejecutivo para reformar la caja militar. Una fuente del gobierno confesó que allí existe “preocupación” por el hecho de que los militares, a pesar de las sanciones, sigan haciendo manifestaciones públicas que la Constitución les tiene vedadas. “Yo creo que es hora de tomar una medida radical para que este tipo de cosas no sigan pasando. Por ahora, la solución que más consenso genera es reformar la Constitución para permitirles que hablen de política todo lo que quieran. La verdad es que es lo único que se nos ocurre”, expresó. Fuentes del Ejército relataron que Manini Ríos se tomó la sanción “con calma y hasta cierto optimismo”. “Es claro que a nadie le gusta ser sancionado. Por otro lado, él está contento de tener 30 días de paz y tranquilidad para poder pensar nuevas formas de violar la Constitución”, aseguró un oficial en actividad. El comandante en jefe del Ejército había contado en su entorno que en su hogar hay mucho ruido y le cuesta concentrarse, por lo que no puede planear todas las intervenciones públicas sobre política que le gustaría. “Los militares que dieron el golpe en 1973 pudieron hacerlo porque tenían mucho tiempo libre para pensar las cosas. Los de ahora tienen muchas preocupaciones en la cabeza, como el presupuesto, las jubilaciones, los pactos de silencio. Así es muy difícil”, opinó el oficial consultado.