Argentina está sufriendo desde hace algunas semanas un brote de hantavirus que ya se cobró la vida de más de una docena de personas. El presidente de ese país, Mauricio Macri, consideró que la situación “es delicada, pero está en vías de mejorar”. “Con la inflación que tenemos, creemos que van a seguir aumentando los casos de personas que comen ratas para sobrevivir. Dentro de algunos meses esos animales van a estar casi extintos. Hay que ser positivos, porque nos están pasando cosas buenas”, declaró el mandatario. Las autoridades sanitarias de Uruguay están tomando recaudos para evitar que el brote de hantavirus se traslade al país, aunque consideraron que el riesgo de que esto ocurra es “casi inexistente”. “Prácticamente no vienen argentinos este verano. Tendríamos que tener mucha mala suerte para que alguno de los pocos visitantes de la vecina orilla justo estén contagiados”, declaró un funcionario del Ministerio de Salud Pública. “Además, los pocos que vienen son personas de un alto poder adquisitivo que difícilmente hayan visto una rata en su vida”. De todas maneras, el funcionario consideró que “no estaría de más extremar los cuidados para evitar que el virus llegue a Uruguay”. Algunas de las medidas que propuso fueron hacer caer el acuerdo de precios para los supermercados en el este y lanzar una campaña publicitaria en Argentina que informe acerca de las escasas posibilidades de que el clima mejore en lo que queda de la temporada.