Un equipo de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República logró identificar una nueva especie de pez, cuyo hábitat se encuentra en las inmediaciones del puerto de Montevideo. Según explicó un investigador de ese centro de estudio, “su organismo es muy parecido a la corvina, casi idéntico, pero su comportamiento difiere bastante”. “Por ejemplo, es capaz de pasar más de 47 días sin dormir, es tremendamente hiperactivo, y su mordedura es asombrosamente potente para su tamaño. Sus mandíbulas aprietan con tanta fuerza como las de los tiburones”, detalló.

Los científicos creen que estas mutaciones se generan como consecuencia del vertido de residuos provenientes de los cargamentos que circulan por el puerto de Montevideo. “Por más que los contenedores estén sellados, siempre existe el riesgo de que algo de la mercadería se escape. Además, se dan casos en los que cargamentos enteros son arrojados al agua, lo que es bastante curioso, porque da la impresión de que lo que se busca es que no sean encontrados”, explicó el científico consultado.

Pero los aspectos que más llamaron la atención en esta especie están relacionados con su capacidad para comunicarse. “Sabemos de algunos mamíferos acuáticos, como los delfines, que son capaces de comunicarse mediante procesos muy similares al habla. Pero lo que hace esta nueva especie es prácticamente idéntico a hablar. De hecho, creemos que es difícil entenderles porque hablan muy rápido, pero no porque su lenguaje sea primitivo”, consideró el investigador.