Versiones de prensa que circularon a comienzos de semana señalaban que el precandidato a la presidencia por el Frente Amplio (FA), el comunista Óscar Andrade, habría aceptado el respaldo de la Lista 711 a su precandidatura, pero siempre y cuando sus principales referentes, Raúl Sendic y Leonardo de León, se abstuvieran de aparecer en la campaña. Desde el Partido Comunista rechazaron esta posibilidad. “Si llevamos a la Cámara de Diputados a Michelle Suárez y seguimos acá, eso quiere decir que somos inmunes a la mala imagen por asociación”, declaró un dirigente comunista. Lo cierto es que hasta el momento el sector liderado por Sendic no ha definido a qué precandidato apoyará. Algunos dirigentes del FA afirman que esto se debe a que desde la 711 “están desarrollando prácticas extorsivas hacia los precandidatos”. “El modus operandi es el siguiente: se contactan con el precandidato y le reclaman una fuerte suma de dinero. Si no la consiguen, amenazan con respaldarlo en la interna”, explicó un dirigente frentista. Desde la 711 no quisieron confirmar ni desmentir la existencia de esta práctica. De todas maneras, reconocieron que “desde que los principales dirigentes de nuestro sector no tienen tarjetas corporativas ni viáticos, o tienen pero no pueden gastarlos para no marcar tanto, la situación económica es bastante jodida. De algún lugar tenemos que sacar la plata, sobre todo porque a partir de 2020 nuestros ingresos van a descender aun más”.