Varios comercios de todo el país, incluyendo supermercados y estaciones de servicio, comenzaron a cobrar las bolsas plásticas dos meses antes del plazo establecido por la ley. Estas bolsas, sin embargo, no son compostables, como indica la norma, por lo que son más baratas y el margen de ganancia para los comerciantes es mayor. “Esto de la lucha por la ecología es algo maravilloso. Cuando empezaron con las propuestas pensé que nos iba a traer problemas, pero ahora que nos estamos llenando de plata vemos la cosa con otros ojos”, declaró un directivo de una cadena de supermercados.

Los expertos en temas ambientales criticaron fuertemente la medida de los empresarios y comerciantes, y la calificaron de “peligrosa” para la ecología. “Quiero creer que ningún ser humano va a ser tan estúpido como para creerse esta publicidad engañosa. Pero las tortugas marítimas no son tan inteligentes. Temo que empiecen a comerse las bolsas creyendo que no son tan dañinas”, reconoció un ambientalista.