El presidente Tabaré Vázquez se reunió el viernes con el director ejecutivo de la empresa UPM, Jussi Pesonen, para avanzar en la instalación de la planta de la empresa. Tras el encuentro, el mandatario aseguró que solamente faltan “detalles menores” para que el proyecto se concrete, algo que fue ratificado luego por Pesonen. “Son detalles mínimos, como por ejemplo el interés nacional de un país muy pequeño llamado Uruguay. Pero se trata de una nación casi insignificante, así que es un tema muy menor”. Al mismo tiempo que se llevaba a cabo el encuentro, el precandidato a la presidencia por el Partido Verde Animalista, Gustavo Salle, se encadenó a una silla de playa en la plaza Independencia para protestar por la firma del acuerdo. El abogado explicó que planea aplicar esas misma medida de lucha si gana las elecciones. “Mi primer acto como presidente va a ser encadenarme a la silla del despacho presidencial, para asegurarme de que no voy a traicionar mis propios principios. No quiero que me pase lo mismo que al Frente Amplio, por eso voy a adoptar esa medida de protesta contra los posibles deseos que pueden surgir en mi interior de volverme funcional a la cleptocorporatocracia multinacional”. Salle también aprovechará para encadenarse a algunos de los dirigentes con los que comparte una misma visión de la realidad nacional, como Marcelo Hospitale. “Los radicales tenemos una tendencia fuerte a la atomización. Encadenarnos nos va a servir para resistir el impulso de enfrentarnos”.